miércoles, 25 de diciembre de 2013

Capitulo 2 ~

Antes de que me tiren tomates a la cara
lean primero el capitulo.
....¿Por favor?
Este capitulo esta compuesto como el anterior:
Primera parte escrita por Green, Purple y Grey (no la de Fifty Shades Of Grey.)
La segunda parte escrita por Orange.
Y la tercera parte escrita por Rose y Cyan.

La de Blue.... 
Pues.... una de dos:
o esta muerto y reviviendo a cada rato
o esta preparando algo grande para el próximo capitulo 

------------------------------------------------------------

~ Primera parte: Están seguras? ~

-¿Estás preparada?-Mochi, Nerea y Chess caminaban por el bosque, listas para que Nerea
aprendiera a usar sus poderes y aumentarlos.
-Supongo que sí...-Nerea dudó por un momento-Aún no siento que yo sea una portadora.
-! No digas eso!-la reprendió Chess-¡Una esmeralda nunca se equivoca! y por el modo en que brilla es evidente que tú eres la portadora.
-Aquí es-dijo Mochi, las tres se detuvieron en un pequeño claro a pocos minutos de la casa-cuartel. Había algunas tablas con blancos y otros objetos de entrenamiento.
-¿Que haremos?-preguntó Nerea.
-Aprenderás a usar tus poderes-la lince le sonrió con confianza-¿Con cuál quieres comenzar?:
-¿Supervelocidad?
-Está bien, Chess explícale.
-Nere-dijo la eriza blanco y negro con una sonrisa extraña-Lo que tienes que hacer es concentrarte, correr y esquivar estos empre comunicándote con tu esmeralda.
-¿Y cómo hago eso?
-! Yo que da portador tiene una conexión diferente con su esmeralda.
-Bueno...
-¿Lista?-Mochi y Chess se apartaron para dejarle camino libre.
-Sí, estoy lista-dijo Nerea pero al mismo tiempo pensaba "No podré, no podré"
-Suerte-le dijo Mochi y sopló un silbato, la señal para que Nerea comenzara el entrenamiento.
Nerea arrancó a una velocidad inmensa, pasó el primer árbol por un pelo y los pensamientos negativos se acumulaban en su cabeza.
"Nunca lo lograré”, Nerea seguía pensando ¿Qué dirían los demás si ella llegaba a fallar? ¿Decepcionaría a Chess a Mochi y a los otros? ¿En verdad era la portadora de la esmeralda violeta? Entre pensamiento y pensamiento, la eriza morada no se fijó en un gran árbol que había en frente y terminó estrellándose de cara con este.
Mochi y Chess se miraron preocupadas y corrieron a ayudar a la rea estaba inconsciente y con un morado en el ojo, Mochi trató de despertarla haciéndole cosquillas con una hoja, Chess trató arrojándole un chorro de agua encima, pero nada. Después de unos minutos se despertó algo confundida.
-¿Estás bien?-Mochi la ayudo a levantarse.
-¿Qué sucedió?-preguntó Nerea tocándose la cabeza.
-Te estrellaste con un árbol-dijo Chess.
-Cielos...soy una tonta.
-Nada de eso-le dijo Mochi-Todos fallamos la primera vez, es normal.
-¿Y cuál es la siguiente prueba?
-Fuego y Rayos, pero antes deberías colocarte hielo ahí-Chess señaló su ojo amoratado y le paso una bolsa con. Nerea estaba muy adolorida.
-Te explicaremos la prueba mientras te Chess te dará una demostración ya que ella tiene esos poderes.
-Sip, pero Mochi es mejor con la parte técnica.
-Como sea, es simple, tienes que concentrarte igual que en la prueba anterior, y debes darle en el blanco a los tablones que colocamos por allá.
-Creo que ya estoy lista.
-¿Segura? puedes descansar un poco más.
-Chess muéstrame.
Chess se colocó frente a uno de los tablones, cerró los ojos y una bola de fuego salió despedida de su mano izquierda, quemando el tablón.-Solo puedo controlar los rayos si está lloviendo-dijo riéndose como loca y luego puso una expresión seria.
-Ahora es tu turno Nere-dijo Mochi.
Nerea se colocó frente a los tablones, cerró sus ojos y sintió la energía en su interior. Una ráfaga de fuego salió de su mano y quemó un tablón.
-¿Estuvo bien?-preguntó, pero entonces escucho los gritos de las otras chicas ¡las botas de Chess se estaban quemando!
-AAAAAAAAAAAAAY!!!-gritaba del dolor, se puso a saltar por todas partes. Les echo un chorro de agua y sus botas quedaron reducidas a cenizas y ella descalza.
-Lo siento.
-No importa-Mochi se aguantaba la risa-Chess y yo casi destruimos el bosque entrenando nuestros poderes.
-¡DE ESTA NO TE ESCAPAS!-la eriza bipolar sacó su cuchillo y se abalanzó sobre Nerea, pero Mochi la detuvo con una rama de árbol.
-Chess! ella no lo hizo a propósito.
-Tienes razón, lo siento Nere
-Comenzare con los rayos-dijo colocándose en posición "esta vez lo haré"
Había ya fallado en dos pruebas, Nerea se sentía insegura y patética, se veía incapaz de hacer nada; por una parte de su mente todo era oscuro y sin esperanzas, pero por otra oía los ánimos que le daban sus nuevas amigas que la ayudaban a pesar de sus desastres.
-Bueno ¿estás lista?-pregunto Mochi mirándola un poco preocupada.
-Emm… si si ¿Qué tengo que hacer esta vez?-la eriza dejo de lado sus pensamientos y se centro en su siguiente prueba.
-Bien, ahora en la prueba de rayos tendrás que hacer algo muy sencillo-comenzó diciendo Chess-Lo que tienes que hacer es concentrarte de nuevo, y desintegrar un árbol entero.
-¿¡Y a eso lo llamas sencillo!?-se asustó Nerea.
-Hay pruebas mucho mas complicadas, digamos que esto es lo más fácil que hay-dijo Chess intentando animarla.
Nerea suspiró.
-Está bien-dicho esto, la eriza morada cerró los ojos y puso su atención con la mente al árbol que tenía delante, esta vez, se sintió más viva que en las otras pruebas, sí estaba nerviosa pero de alguna forma entendía sus movimientos.
Su mano comenzó a brillar, por ahora bien, Chess y Mochi la miraban con cara de asombro ¿Sería capaz de controlar los rayos?
Entonces salió una ráfaga de rayos de su mano hacia el árbol, pero hubo algo que asustó a Nerea de su objetivo.
-¡AU!-se toco la mano cuidadosamente.
-¿Qué pasa? Lo estabas haciendo muy bien-se acerco Mochi.
-Duele mucho-se quejo Nerea sintiéndose impotente.
-Eso suele pasar las primeras veces-la tranquilizo Chess-ya verás que a medida que vayas practicando ya no te dolerá.
-Vamos a ver como ha quedado el árbol-todas miraron hacia el objetivo y vieron que estaba medio chamuscado pero no se había hecho mucho desastre como se pretendía.
-Pobre árbol-dijo triste Mochi.
-Y pobre de mi mano…-Nerea agacho la cabeza. Mochi se sentó al lado de ella.
-Se que te sientes mal por no controlar bien tus poderes, pero el pesimismo no te ayudara a superarlo… Ya veras, que dentro de unos días estarás utilizando tus poderes con mucha facilidad-le sonrió.
-Pues claro que si, a todas nos pasa al principio, tú no te desanimes-la animo también Chess.
Nerea alzó la cabeza de nuevo y les sonrió.
-Gracias, ya me siento mucho mejor.
-Bueno pues si quieres volver a intentar algo-dijo Chess-¡nosotras estamos aquí para ayudarte!
-Bueno, la verdad querría probar con los rayos de nuevo, si no es molestia-contesto algo tímida.
-Jajaja está bien, pero ten mucho cuidado esta vez-la animo Mochi.
-Eso intentare-sonrió un poco.
-¡Ese es el espíritu!-grito Chess
Nerea se preparo de nuevo para intentarlo, pero a pesar de que su seguridad, las dudas seguían en su cabeza. ¿Y si no lo lograba? ¿Y si no conseguía poder hacer algo para ayudar? ¿Y si no era la portadora? Esas preguntas pasaban a una velocidad increíble en la cabeza de la pobre eriza violeta, que intentaba mantener el animo arriba.
-¡Vamos, espíritu recuerda!- gritaba Chess alzando las manos.
Nerea miro el árbol semi-chamuscado, miro sus manos y volvió a mirar su objetivo, esta vez no tenia que fallar. Cerro sus ojos y sus manos volvieron a brillar mientras las otras chicas miraban con atención, con esperanza de que iba a salir bien. De sus manos salieron los rayos directo al árbol con una fuerza increíble, todo salia bien, hasta que una queja la distrajo.
-¡AHH!- Mochi gritó alejándose de donde el rayo casi le daba, aunque parte de su bota termino quemada. Nerea abrió los ojos y se sintió fatal, no podía controlar ninguna de sus habilidades, hasta ya había quemado a sus nuevas amigas anteriormente, miro para abajo y otra vez los pensamientos volvieron ¿Y si jamas conseguía controlar sus poderes? ¿Y si se equivocaron de chica y ella no era una portadora? Simplemente por puro instinto, Nerea se fue corriendo directo al bosque.
-¡Nerea! ¡Espera!- gritó Chess, pero la eriza violeta ya se había alejado.
-Comprendamosla... esta insegura...- dijo Mochi levantándose.
-¡Insegura o no tiene que entrenar! ¡Busquemosla!- Chess salio corriendo por donde la chica se había ido, seguida por Mochi que solamente asintió.
OoooooooooooooooO
Nerea se había detenido y se encontraba sentada recostada en un árbol. No sabia que hacer, simplemente empezó a correr y ahí quedó.
-Ahora las demás deben estar buscándome... o no.- pensó Nerea mientras se agarraba las piernas.-No debí irme...- buscó en su bolsillo hasta encontrar lo que buscaba: Su esmeralda purpura. La miro fijamente como intentando buscar una respuesta en el brillo que producía. De la nada empezó a brillar con mas fuerza, pero Nerea no lo notaba, solo sentía su calor, la paz que producía, cerro sus ojos y se dejo llevar por Morfeo.
No sabia cuanto tiempo se durmió, pero cuando despertó escucho una pequeña voz:
-Tranquila, todo saldrá bien...- le decía una voz serena, pero esa voz se quedo interrumpida por un grito.
-¡NEREA!- Mochi se acerco lo mas rápido que pudo y la abrazo.- ¡Ni se te ocurra hacer eso de vuelta!- dijo mientras la apretaba con fuerza.
-Mochi, tampoco es para tanto.- dijo Chess poniéndose a su lado.
Nerea por ahora se encontraba recordando esa voz, por alguna razón la tranquilizaba. Se puso de pie soltando a Mochi y se puso frente a las dos.
-Lamento mucho haberme ido así...- bajo su cabeza- No debí hacerlo...-
-Tranquila, no pasa nada, te comprendemos, pero por favor no lo hagas de vuelta ¿si?- Mochi sonrió y Nerea asintió con la cabeza.
-Perfecto... ¿aun quieres entrenar?-

-¡Claro!- Nerea levanto la cabeza y mostró una amplia sonrisa. Despues de una larga caminata, las tres chicas se encontraban entrenando, Nerea trataba de dar lo mejor de si, siempre recordando esa voz.

------------------------------------------------------

~ Segunda parte: Este es mi destino? ~

Tres días habían pasado desde el extraño incidente que Nia había tenido en el lago del bosque, desde que tocó esa esmeralda se había sentido bastante extraña, pero eso no le molestaba
incluso tenía una sensación de paz al tocar la dichosa "piedra".

-Han pasado tres días y aún no entiendo esto, pero...-la chica tomó la esmeralda entre sus manos y ésta comenzó a brillar intensamente- la sensación que me brinda ... es muy cálida- abrazó a la
"joya" contra su pecho y cerró los ojos
-'Nia' - se quedó tiesa
-Esa voz... es la misma que escuché cerca del lago- entonces miró la esmeralda que estaba entre sus manos - tú eres quien me llamó- le esmeralda emitió un brillo aún más resplandeciente
-'En efecto, fui yo quien te llamó'- la eriza miró más de cerca la esmeralda, ¿acaso esa "joya" podía hablar?-'sí, pero solo puedo hablar contigo'
-¿Cómo..
-'Estamos conectadas, tu alma se unió a mí y eso permite que pueda escuchar tus pensamientos'- Nia no podía creer lo que escuchaba, pero de cierta forma eso explicaba algunas cosas
-Lo siento, debo salir un momento, esto es muy confuso para mí-dejó la esmeralda en una pequeña cajita y la guardó en un lugar seguro
Nia salió de su casa y caminó sin dirección alguna, solo quería despejar su mente
-¿Todo esto es parte de mi destino?, no puedo creer que algo así esta pasando, sin duda alguna siento una conexión muy fuerte hacia esa esmeralda- sin querer llegó a un pequeño parque,
había muchos niños jugando, ella se sentó en un columpio vacío y se cruzó de brazos- sin embargo, no logro comprender el hecho de que me haya conectado con ella- se quedó algunas horas
hundida entre sus pensamientos hasta que algo le cayó sobre la cabeza, miró al suelo y se dio cuenta de que una pelota la había golpeado
-¡Hey, niña! ¿nos pasas la pelota por favor?- más adelante se encontraban algunos niños haciéndole señas para que les pasara el balón, sonrió y se puso de pie
-Claro ahí va- pateó la pelota y ésta llegó hasta manos de uno de los niños que le había gritado
-¡Gracias!- Nia solo levantó la mano y se retiró de ahí, pronto volvió a caer en sus pensamientos, después de caminar durante un rato se quedó parada mirando al cielo, estaba anocheciendo
-Tengo un presentimiento, no sé que es, pero sé que tengo que hacer algo-

Una vez que la eriza llegó a su casa sacó la esmeralda de donde la tenía guardada y la colocó frente a ella
-Mi alma, dime una cosa ¿porqué yo?
-'Eso lo debes saber tú, pero te lo diré, eres diferente y tienes potencial, además no eres alguien que se interese por su bien propio, he estado contigo desde hace mucho tiempo
a pesar de que no te dabas cuanta de mi presencia y sé que hay algo especial en ti'- en ese momento los ojos de Nia adquirieron una tonalidad anaranjada, como si estuviera en shock,
pero luego de unos minutos volvieron a su color natural
-Ya veo
-'Se que estas confundida y tal vez dudes sobre lo que te dije, pero de no ser así, tú y yo no nos hubiéramos conectado'- la eriza sonrió ante aquellas palabras
-No te defraudaré, ya lo verás- comentó aún sonriendo
-'Lo sé'- la esmeralda volvió a brillar con intensidad, la chica sintió ese cosquilleo agradable en su cuerpo-'ahora debes buscar a los demás'
-¿Los demás?
-'Son contadas las almas como la tuya,tienes que encontrarlas y ayudarles a hacer el bien'
-Entiendo pero ¿cómo sabré quienes son?
-'Lo sabrás muy pronto'
-Bien pues no se diga más, partiré de inmediato- Nia tomó su mochila y  metió unas cuantas cosas que necesitaría para su viaje, también tomó a la esmeralda y apretándola
contra su pecho salió para encontrarse con su "destino"


----------------------------------

 ~ Tercera parte: Demasiadas pregunta ~


Era por la mañana temprano, solo se oía a los pájaros cantar y las cigarras gorjeando.
Nos colocamos en la colina más alta del lugar, donde pocas veces la gente subía.
Llegó a la cima una eriza rosa, que empezó a mirar por los arbustos y árboles del alrededor, buscando algo.
-¡Tenéis que ser más rápidos!-Gritó a sus compañeros que estaban subiendo la colina.
-¡Nosotros no tenemos tanta energía!-Dijo un erizo azul celeste subiendo agotado la colina.
-¡Y hoy no quedaba azúcar!-Dijo entre sollozos una eriza cyan.
-Me pregunto quién se lo habrá comido...-Dijo la eriza rodando los ojos y sonriendo de lado.
-¡Un momento!-Dijo la eriza cyan.- ¿Que has desayunado?-Dijo intimidante.
-Eeeeh...-Dijo nerviosa.
-¿Clauuuu?-Dijo sin quitarle la mirada de encima.
-No me mires así que me intimidas.-Dijo en tono de broma.
-¿¡Te has comido todo el azúcar!?-Le gritó.
-Harriet cálmate-Dijo el erizo azul.-Hemos venido a buscar esmeraldas, no a pelear.
-¡Tu cállate que sabes que pierdes!-Le gritó Harriet irritada.
-Mami no te pongas así...-Dijo con cara de cachorrito la eriza de ojos azules.
-¡Ahora no me mires así, solo CONFIESA!-Dijo con cara de desquiciada.
-Vaaale....lo confieeeso...-Dijo.-Me comí todo el azúcar....
-¿Tres bolsas de azúcar?-Dijo el erizo azul celeste, que no acababa de creérselo.
-¡Lo sabía! Como se nota que eres mi hija.-Dijo orgullosa la eriza cyan-
-¿No me vas a regañar?-Dijo algo sorprendida la pequeña.
-¿Debería?
-Eeem...-Dijo algo confundida.
-¿Seguimos buscando las esmeraldas?-Dijo ya agotado el erizo azul celeste.
-Vale.-Contestaron las dos.
De repente escucharon unas voces. Los portadores se miraron entre ellos y se escondieron en unos arbustos, cerca de las voces.
-Quédense quietas y no hagan ruido- dijo Blue
Sus amigas asintieron con la cabeza y tendieron el oído para escuchar las voces…
-…bemos atacarlos uno a uno, cuando estén solos-decía una voz tétrica y escalofriante.
-¡No! ¡Ataquemos ahora! ¡Ya me tienen hasta la coronilla con sus estúpidos poderes!-dijo una voz nueva, irritante al escuchar.
-Ahora entiendo porque siempre te atrapan…. Tienes que ser paciente, Mephiles tiene razón cuando los portadores están solos se desesperan por el miedo del olvido- dijo una voz, que los tres escondidos reconocieron perfectamente. Blue y Harriet se miraron a los ojos en los cuales se veía la preocupación, mientras que la pequeña se apegaba a su madre adoptiva.
-Mientras-continuo la voz- debemos encontrar a los dos otros portadores. Debemos arrebatarles las esmeraldas antes de que se den cuenta la conexión que tienen.
-¡Es tan simple! –Dijo la desconocida voz- Les recuerdo que para encontrar una esmeralda se necesita otra.
-Estúpido-dijo Mephiles- yo puedo localizar la energía Chaos. Siento que hay una gran concentración de poder cerca de Mistic Ruins y sus alrededores. Seguramente el portador nunca se separa de su esmeralda.
-Bien-dijo Nazo, al parecer con una sonrisa- Scourge, iras tú a buscarla.
-Con q-!-queja que no pudo terminar el erizo verde ya que se vio interrumpido por el celeste.
-Iras y punto. Con los poderes que te dimos no serás detectable para la esmeralda del portador. Mientras con Mephiles buscaremos a Metal Sonic.
-¿Al robot del gato azul? ¿Para qué?-pregunto con insolencia el de gafas de sol.
-Por si Sonic y sus compañeros vienen a interferir en nuestro planes. Él y yo somos los únicos que hemos estado a punto de acabar con Sonic.
En los arbustos los dos erizos adolecente estaban más pálidos que Rouge y la pequeña Rose, al oír el nombre del robot malos recuerdos llegaron a ella, saco su esmeralda.
Tranquilidad. Paz.
Se acercó más a los otros dos erizos. Para escuchar más.
Crack
Scourge lo escucho. Se giró hacia el lugar donde se quebró la pequeña rama.
-¿¡Quien anda ahí!?-Gritó, mientras Mephiles creaba una bola de energía para disparar a los que estuvieran por ahí.
Entonces vieron a Sonic pasando por ahí.
-A ver, a ver...ya le he pateado el culo a Eggman, he ayudado a Tails con sus experimentos raros, he encontrado a Cheese, he jugado a las muñecas con Cream, he molestado a Knuckles... ¿qué más?-Dijo el erizo azul.
Los tres villanos, al reconocer a Sonic, se esfumaron de ahí en menos que canta un chao.
Sonic vio al trio, escondido entre los arbustos, y para suerte de estos tres, no le pareció extraño.
-¿Qué hacen ahí? ¡Ni que se escondieran de alguien!
-¡Hey, Sonic! ¿Qué tal? Terminaste con tu recorrido de hoy por lo que veo-dijo Blue levantándose de su lugar para ir al lado de su mejor amigo
-¿Vienes a molestar a los animales del bosque con tu compañía?-Dijo la eriza cyan mientras se levantaba y ayudaba a su hija a hacerlo.
-Ja. Ja. Ja. ¿Te comiste un payaso con azúcar al desayuno  o qué? –le pregunto con fastidio el de ojos verdes
Clic. La palabra.
-¡Mi azucaaaaaaaaaar! – dijo sollozando falsamente mientras se recargaba en el hombro de Blue, quien con cara de cansado le daba unas cuantas palmadas en la espalda en signo de consuelo.
-…. –solo miraba a su amigo de ojos verdes- Dime Harriet, ¿No que tenías una reserva de azúcar?
La eriza levanto la cabeza y empezó a pensar….
-………………-abrió la boca para decir algo-……-el cerro y la volvió a abrir- Si….pero solo Yoel tiene la llave y no me la va a querer dar.
Sonic, aprovecho para reírse de su cara sabiendo que la pagaría caro, muy caro.
Blue se moría de la risa interiormente, no quería ser víctima de una venganza, otra vez.
Claudia sabía que se terminaría mal, lo sabía muy bien.
El azul, se dio cuenta de la cara de Harriet (cara de asesina, digna de Chess) y decidió callarse por su bien mental y físico. Pero algo le llamo la atención.
Un brillo. De color Rosa. En las manos de la hermana de Amy.
-¡¿Qué es eso?! ¡¿Una esmeralda?!¡¿De color rosa?! ¡¿Como la conseguiste?!
Preguntas. Sin respuestas. Pero seguía preguntando.
Los portadores se estaban desesperando, no podían responderle, por su bien.
Una idea, no brillante. Era una idea idiota, pero al fin y al cabo una idea.
-¡Cállate de una maldita vez!-grito, acompañado de un golpe en la nuca.
Silencio.
-¿¡PERO A TI QUE DEMONIOS TE PASA?!-Le grito Blue (histérico) a Harriet, la cual se tapó los oídos.
-OOOOOOHHHH!! ¡No sé! ¡¿A TI QUE TE PARECE?!
Y antes de que se empeorara la situación, la más madura y calmada en ese momento los interrumpió…por no decir regaño
-¡SILENCIO LOS DOS!
Silencio. Acompañado de mejillas rojas de vergüenza.
-Si no lo hubiera hecho, estaríamos en problemas con sus preguntas.-le dijo a Blue la portadora rosa.
-¡Pero no le hubiera pegado tan fuerte!
-¡Merecido lo tiene por idiota!
-¡No lo es!
-¡Si!
-¡No!
-¡Si!
-¡No!
-¡Silencio ustedes dos!-una nueva voz vino a la conversación. Con un ligero toque fantasmal.
-¿Y ahora qué pasa con estos dos, Yoel?
-Simple, Harriet le pego a Sonic porque hacia demasiadas preguntas-contesto Blue a los dos hermanos fantasmas
-Siempre usando el cerebro, hermana.
-¡Bien hecho! (nótese la ironía)
Con el tic en el ojo, la eriza de color turquesa se controlaba para no convertirlos en cubitos de hielo en ese mismo instante.
-¡Pero Sonic hacia muchas preguntas sobre la esmeralda rosa!-defendió la Claudia.-Si las hubiéramos respondido, tendríamos que haber explicado lo de los portadores.
Silencio.
Sonrisa de victoria.
Lengua fuera de la parte de la eriza mayor.
-Por eso la quiero tanto- abrazando a su hija mientras los hombre las miraban con cara de derrotados.
-Y cuando se levante, ¿Qué le vamos a decir?-pregunto Henry, con la sonrisa en la cara.
-Ahí es donde ustedes dos entran- señalando a sus hermanos- Entran en su mente, le borran o sustituyen el recuerdo de la esmeralda rosa y antes de que despierte nos largamos de aquí.
-¿Todos o…?- Blue y sus preguntas no tan inútiles.
-No, Henry, Yoel y yo nos iremos. –Se miraron preocupados- Es mejor limitar nuestros encuentros… Cada vez se nos hace más difícil esconder lo de los portadores y las esmeraldas que Sonic no conocía la existencia. Sera mejor que solo nos veamos cuando sea necesario.
-¡NO!-Se reusaba la pequeña, su hija. La abrazo, con todas sus fuerzas- no quiero sepárame de ti, quiero que estemos juntos, los tres y los demás portadores.
-Yo también quiero eso, pero es lo mejor para nuestro bien ARF –dijo la eriza secándole las lágrimas que amenazaban con salir. –Usaremos los comunicadores que Exe nos dio.
Y la volvió a abrazar. Pero Blue se unió, dándole a la rosa una sensación de tener una familia.
-Cuídate Harriet, y a los demás. Yo me encargo de pasarles el mensaje Noah y Katy. –Dijo Blue, rompiendo el abrazo- Yo cuidare de Clau.
-Listo-interrumpió Yoel- Ya es hora, se despertara en cualquier momento.
Asintió con la cabeza y sintió como las auras de sus hermanos se fundieron con la suya. Se elevó con el viento y se alejó de ahí…. Mirando hacia atrás y agitando la mano.
Una lagrima se resbalo por la mejilla de cada eriza.