miércoles, 25 de diciembre de 2013

Capitulo 2 ~

Antes de que me tiren tomates a la cara
lean primero el capitulo.
....¿Por favor?
Este capitulo esta compuesto como el anterior:
Primera parte escrita por Green, Purple y Grey (no la de Fifty Shades Of Grey.)
La segunda parte escrita por Orange.
Y la tercera parte escrita por Rose y Cyan.

La de Blue.... 
Pues.... una de dos:
o esta muerto y reviviendo a cada rato
o esta preparando algo grande para el próximo capitulo 

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~ Primera parte: Están seguras? ~

-¿Estás preparada?-Mochi, Nerea y Chess caminaban por el bosque, listas para que Nerea
aprendiera a usar sus poderes y aumentarlos.
-Supongo que sí...-Nerea dudó por un momento-Aún no siento que yo sea una portadora.
-! No digas eso!-la reprendió Chess-¡Una esmeralda nunca se equivoca! y por el modo en que brilla es evidente que tú eres la portadora.
-Aquí es-dijo Mochi, las tres se detuvieron en un pequeño claro a pocos minutos de la casa-cuartel. Había algunas tablas con blancos y otros objetos de entrenamiento.
-¿Que haremos?-preguntó Nerea.
-Aprenderás a usar tus poderes-la lince le sonrió con confianza-¿Con cuál quieres comenzar?:
-¿Supervelocidad?
-Está bien, Chess explícale.
-Nere-dijo la eriza blanco y negro con una sonrisa extraña-Lo que tienes que hacer es concentrarte, correr y esquivar estos empre comunicándote con tu esmeralda.
-¿Y cómo hago eso?
-! Yo que da portador tiene una conexión diferente con su esmeralda.
-Bueno...
-¿Lista?-Mochi y Chess se apartaron para dejarle camino libre.
-Sí, estoy lista-dijo Nerea pero al mismo tiempo pensaba "No podré, no podré"
-Suerte-le dijo Mochi y sopló un silbato, la señal para que Nerea comenzara el entrenamiento.
Nerea arrancó a una velocidad inmensa, pasó el primer árbol por un pelo y los pensamientos negativos se acumulaban en su cabeza.
"Nunca lo lograré”, Nerea seguía pensando ¿Qué dirían los demás si ella llegaba a fallar? ¿Decepcionaría a Chess a Mochi y a los otros? ¿En verdad era la portadora de la esmeralda violeta? Entre pensamiento y pensamiento, la eriza morada no se fijó en un gran árbol que había en frente y terminó estrellándose de cara con este.
Mochi y Chess se miraron preocupadas y corrieron a ayudar a la rea estaba inconsciente y con un morado en el ojo, Mochi trató de despertarla haciéndole cosquillas con una hoja, Chess trató arrojándole un chorro de agua encima, pero nada. Después de unos minutos se despertó algo confundida.
-¿Estás bien?-Mochi la ayudo a levantarse.
-¿Qué sucedió?-preguntó Nerea tocándose la cabeza.
-Te estrellaste con un árbol-dijo Chess.
-Cielos...soy una tonta.
-Nada de eso-le dijo Mochi-Todos fallamos la primera vez, es normal.
-¿Y cuál es la siguiente prueba?
-Fuego y Rayos, pero antes deberías colocarte hielo ahí-Chess señaló su ojo amoratado y le paso una bolsa con. Nerea estaba muy adolorida.
-Te explicaremos la prueba mientras te Chess te dará una demostración ya que ella tiene esos poderes.
-Sip, pero Mochi es mejor con la parte técnica.
-Como sea, es simple, tienes que concentrarte igual que en la prueba anterior, y debes darle en el blanco a los tablones que colocamos por allá.
-Creo que ya estoy lista.
-¿Segura? puedes descansar un poco más.
-Chess muéstrame.
Chess se colocó frente a uno de los tablones, cerró los ojos y una bola de fuego salió despedida de su mano izquierda, quemando el tablón.-Solo puedo controlar los rayos si está lloviendo-dijo riéndose como loca y luego puso una expresión seria.
-Ahora es tu turno Nere-dijo Mochi.
Nerea se colocó frente a los tablones, cerró sus ojos y sintió la energía en su interior. Una ráfaga de fuego salió de su mano y quemó un tablón.
-¿Estuvo bien?-preguntó, pero entonces escucho los gritos de las otras chicas ¡las botas de Chess se estaban quemando!
-AAAAAAAAAAAAAY!!!-gritaba del dolor, se puso a saltar por todas partes. Les echo un chorro de agua y sus botas quedaron reducidas a cenizas y ella descalza.
-Lo siento.
-No importa-Mochi se aguantaba la risa-Chess y yo casi destruimos el bosque entrenando nuestros poderes.
-¡DE ESTA NO TE ESCAPAS!-la eriza bipolar sacó su cuchillo y se abalanzó sobre Nerea, pero Mochi la detuvo con una rama de árbol.
-Chess! ella no lo hizo a propósito.
-Tienes razón, lo siento Nere
-Comenzare con los rayos-dijo colocándose en posición "esta vez lo haré"
Había ya fallado en dos pruebas, Nerea se sentía insegura y patética, se veía incapaz de hacer nada; por una parte de su mente todo era oscuro y sin esperanzas, pero por otra oía los ánimos que le daban sus nuevas amigas que la ayudaban a pesar de sus desastres.
-Bueno ¿estás lista?-pregunto Mochi mirándola un poco preocupada.
-Emm… si si ¿Qué tengo que hacer esta vez?-la eriza dejo de lado sus pensamientos y se centro en su siguiente prueba.
-Bien, ahora en la prueba de rayos tendrás que hacer algo muy sencillo-comenzó diciendo Chess-Lo que tienes que hacer es concentrarte de nuevo, y desintegrar un árbol entero.
-¿¡Y a eso lo llamas sencillo!?-se asustó Nerea.
-Hay pruebas mucho mas complicadas, digamos que esto es lo más fácil que hay-dijo Chess intentando animarla.
Nerea suspiró.
-Está bien-dicho esto, la eriza morada cerró los ojos y puso su atención con la mente al árbol que tenía delante, esta vez, se sintió más viva que en las otras pruebas, sí estaba nerviosa pero de alguna forma entendía sus movimientos.
Su mano comenzó a brillar, por ahora bien, Chess y Mochi la miraban con cara de asombro ¿Sería capaz de controlar los rayos?
Entonces salió una ráfaga de rayos de su mano hacia el árbol, pero hubo algo que asustó a Nerea de su objetivo.
-¡AU!-se toco la mano cuidadosamente.
-¿Qué pasa? Lo estabas haciendo muy bien-se acerco Mochi.
-Duele mucho-se quejo Nerea sintiéndose impotente.
-Eso suele pasar las primeras veces-la tranquilizo Chess-ya verás que a medida que vayas practicando ya no te dolerá.
-Vamos a ver como ha quedado el árbol-todas miraron hacia el objetivo y vieron que estaba medio chamuscado pero no se había hecho mucho desastre como se pretendía.
-Pobre árbol-dijo triste Mochi.
-Y pobre de mi mano…-Nerea agacho la cabeza. Mochi se sentó al lado de ella.
-Se que te sientes mal por no controlar bien tus poderes, pero el pesimismo no te ayudara a superarlo… Ya veras, que dentro de unos días estarás utilizando tus poderes con mucha facilidad-le sonrió.
-Pues claro que si, a todas nos pasa al principio, tú no te desanimes-la animo también Chess.
Nerea alzó la cabeza de nuevo y les sonrió.
-Gracias, ya me siento mucho mejor.
-Bueno pues si quieres volver a intentar algo-dijo Chess-¡nosotras estamos aquí para ayudarte!
-Bueno, la verdad querría probar con los rayos de nuevo, si no es molestia-contesto algo tímida.
-Jajaja está bien, pero ten mucho cuidado esta vez-la animo Mochi.
-Eso intentare-sonrió un poco.
-¡Ese es el espíritu!-grito Chess
Nerea se preparo de nuevo para intentarlo, pero a pesar de que su seguridad, las dudas seguían en su cabeza. ¿Y si no lo lograba? ¿Y si no conseguía poder hacer algo para ayudar? ¿Y si no era la portadora? Esas preguntas pasaban a una velocidad increíble en la cabeza de la pobre eriza violeta, que intentaba mantener el animo arriba.
-¡Vamos, espíritu recuerda!- gritaba Chess alzando las manos.
Nerea miro el árbol semi-chamuscado, miro sus manos y volvió a mirar su objetivo, esta vez no tenia que fallar. Cerro sus ojos y sus manos volvieron a brillar mientras las otras chicas miraban con atención, con esperanza de que iba a salir bien. De sus manos salieron los rayos directo al árbol con una fuerza increíble, todo salia bien, hasta que una queja la distrajo.
-¡AHH!- Mochi gritó alejándose de donde el rayo casi le daba, aunque parte de su bota termino quemada. Nerea abrió los ojos y se sintió fatal, no podía controlar ninguna de sus habilidades, hasta ya había quemado a sus nuevas amigas anteriormente, miro para abajo y otra vez los pensamientos volvieron ¿Y si jamas conseguía controlar sus poderes? ¿Y si se equivocaron de chica y ella no era una portadora? Simplemente por puro instinto, Nerea se fue corriendo directo al bosque.
-¡Nerea! ¡Espera!- gritó Chess, pero la eriza violeta ya se había alejado.
-Comprendamosla... esta insegura...- dijo Mochi levantándose.
-¡Insegura o no tiene que entrenar! ¡Busquemosla!- Chess salio corriendo por donde la chica se había ido, seguida por Mochi que solamente asintió.
OoooooooooooooooO
Nerea se había detenido y se encontraba sentada recostada en un árbol. No sabia que hacer, simplemente empezó a correr y ahí quedó.
-Ahora las demás deben estar buscándome... o no.- pensó Nerea mientras se agarraba las piernas.-No debí irme...- buscó en su bolsillo hasta encontrar lo que buscaba: Su esmeralda purpura. La miro fijamente como intentando buscar una respuesta en el brillo que producía. De la nada empezó a brillar con mas fuerza, pero Nerea no lo notaba, solo sentía su calor, la paz que producía, cerro sus ojos y se dejo llevar por Morfeo.
No sabia cuanto tiempo se durmió, pero cuando despertó escucho una pequeña voz:
-Tranquila, todo saldrá bien...- le decía una voz serena, pero esa voz se quedo interrumpida por un grito.
-¡NEREA!- Mochi se acerco lo mas rápido que pudo y la abrazo.- ¡Ni se te ocurra hacer eso de vuelta!- dijo mientras la apretaba con fuerza.
-Mochi, tampoco es para tanto.- dijo Chess poniéndose a su lado.
Nerea por ahora se encontraba recordando esa voz, por alguna razón la tranquilizaba. Se puso de pie soltando a Mochi y se puso frente a las dos.
-Lamento mucho haberme ido así...- bajo su cabeza- No debí hacerlo...-
-Tranquila, no pasa nada, te comprendemos, pero por favor no lo hagas de vuelta ¿si?- Mochi sonrió y Nerea asintió con la cabeza.
-Perfecto... ¿aun quieres entrenar?-

-¡Claro!- Nerea levanto la cabeza y mostró una amplia sonrisa. Despues de una larga caminata, las tres chicas se encontraban entrenando, Nerea trataba de dar lo mejor de si, siempre recordando esa voz.

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~ Segunda parte: Este es mi destino? ~

Tres días habían pasado desde el extraño incidente que Nia había tenido en el lago del bosque, desde que tocó esa esmeralda se había sentido bastante extraña, pero eso no le molestaba
incluso tenía una sensación de paz al tocar la dichosa "piedra".

-Han pasado tres días y aún no entiendo esto, pero...-la chica tomó la esmeralda entre sus manos y ésta comenzó a brillar intensamente- la sensación que me brinda ... es muy cálida- abrazó a la
"joya" contra su pecho y cerró los ojos
-'Nia' - se quedó tiesa
-Esa voz... es la misma que escuché cerca del lago- entonces miró la esmeralda que estaba entre sus manos - tú eres quien me llamó- le esmeralda emitió un brillo aún más resplandeciente
-'En efecto, fui yo quien te llamó'- la eriza miró más de cerca la esmeralda, ¿acaso esa "joya" podía hablar?-'sí, pero solo puedo hablar contigo'
-¿Cómo..
-'Estamos conectadas, tu alma se unió a mí y eso permite que pueda escuchar tus pensamientos'- Nia no podía creer lo que escuchaba, pero de cierta forma eso explicaba algunas cosas
-Lo siento, debo salir un momento, esto es muy confuso para mí-dejó la esmeralda en una pequeña cajita y la guardó en un lugar seguro
Nia salió de su casa y caminó sin dirección alguna, solo quería despejar su mente
-¿Todo esto es parte de mi destino?, no puedo creer que algo así esta pasando, sin duda alguna siento una conexión muy fuerte hacia esa esmeralda- sin querer llegó a un pequeño parque,
había muchos niños jugando, ella se sentó en un columpio vacío y se cruzó de brazos- sin embargo, no logro comprender el hecho de que me haya conectado con ella- se quedó algunas horas
hundida entre sus pensamientos hasta que algo le cayó sobre la cabeza, miró al suelo y se dio cuenta de que una pelota la había golpeado
-¡Hey, niña! ¿nos pasas la pelota por favor?- más adelante se encontraban algunos niños haciéndole señas para que les pasara el balón, sonrió y se puso de pie
-Claro ahí va- pateó la pelota y ésta llegó hasta manos de uno de los niños que le había gritado
-¡Gracias!- Nia solo levantó la mano y se retiró de ahí, pronto volvió a caer en sus pensamientos, después de caminar durante un rato se quedó parada mirando al cielo, estaba anocheciendo
-Tengo un presentimiento, no sé que es, pero sé que tengo que hacer algo-

Una vez que la eriza llegó a su casa sacó la esmeralda de donde la tenía guardada y la colocó frente a ella
-Mi alma, dime una cosa ¿porqué yo?
-'Eso lo debes saber tú, pero te lo diré, eres diferente y tienes potencial, además no eres alguien que se interese por su bien propio, he estado contigo desde hace mucho tiempo
a pesar de que no te dabas cuanta de mi presencia y sé que hay algo especial en ti'- en ese momento los ojos de Nia adquirieron una tonalidad anaranjada, como si estuviera en shock,
pero luego de unos minutos volvieron a su color natural
-Ya veo
-'Se que estas confundida y tal vez dudes sobre lo que te dije, pero de no ser así, tú y yo no nos hubiéramos conectado'- la eriza sonrió ante aquellas palabras
-No te defraudaré, ya lo verás- comentó aún sonriendo
-'Lo sé'- la esmeralda volvió a brillar con intensidad, la chica sintió ese cosquilleo agradable en su cuerpo-'ahora debes buscar a los demás'
-¿Los demás?
-'Son contadas las almas como la tuya,tienes que encontrarlas y ayudarles a hacer el bien'
-Entiendo pero ¿cómo sabré quienes son?
-'Lo sabrás muy pronto'
-Bien pues no se diga más, partiré de inmediato- Nia tomó su mochila y  metió unas cuantas cosas que necesitaría para su viaje, también tomó a la esmeralda y apretándola
contra su pecho salió para encontrarse con su "destino"


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 ~ Tercera parte: Demasiadas pregunta ~


Era por la mañana temprano, solo se oía a los pájaros cantar y las cigarras gorjeando.
Nos colocamos en la colina más alta del lugar, donde pocas veces la gente subía.
Llegó a la cima una eriza rosa, que empezó a mirar por los arbustos y árboles del alrededor, buscando algo.
-¡Tenéis que ser más rápidos!-Gritó a sus compañeros que estaban subiendo la colina.
-¡Nosotros no tenemos tanta energía!-Dijo un erizo azul celeste subiendo agotado la colina.
-¡Y hoy no quedaba azúcar!-Dijo entre sollozos una eriza cyan.
-Me pregunto quién se lo habrá comido...-Dijo la eriza rodando los ojos y sonriendo de lado.
-¡Un momento!-Dijo la eriza cyan.- ¿Que has desayunado?-Dijo intimidante.
-Eeeeh...-Dijo nerviosa.
-¿Clauuuu?-Dijo sin quitarle la mirada de encima.
-No me mires así que me intimidas.-Dijo en tono de broma.
-¿¡Te has comido todo el azúcar!?-Le gritó.
-Harriet cálmate-Dijo el erizo azul.-Hemos venido a buscar esmeraldas, no a pelear.
-¡Tu cállate que sabes que pierdes!-Le gritó Harriet irritada.
-Mami no te pongas así...-Dijo con cara de cachorrito la eriza de ojos azules.
-¡Ahora no me mires así, solo CONFIESA!-Dijo con cara de desquiciada.
-Vaaale....lo confieeeso...-Dijo.-Me comí todo el azúcar....
-¿Tres bolsas de azúcar?-Dijo el erizo azul celeste, que no acababa de creérselo.
-¡Lo sabía! Como se nota que eres mi hija.-Dijo orgullosa la eriza cyan-
-¿No me vas a regañar?-Dijo algo sorprendida la pequeña.
-¿Debería?
-Eeem...-Dijo algo confundida.
-¿Seguimos buscando las esmeraldas?-Dijo ya agotado el erizo azul celeste.
-Vale.-Contestaron las dos.
De repente escucharon unas voces. Los portadores se miraron entre ellos y se escondieron en unos arbustos, cerca de las voces.
-Quédense quietas y no hagan ruido- dijo Blue
Sus amigas asintieron con la cabeza y tendieron el oído para escuchar las voces…
-…bemos atacarlos uno a uno, cuando estén solos-decía una voz tétrica y escalofriante.
-¡No! ¡Ataquemos ahora! ¡Ya me tienen hasta la coronilla con sus estúpidos poderes!-dijo una voz nueva, irritante al escuchar.
-Ahora entiendo porque siempre te atrapan…. Tienes que ser paciente, Mephiles tiene razón cuando los portadores están solos se desesperan por el miedo del olvido- dijo una voz, que los tres escondidos reconocieron perfectamente. Blue y Harriet se miraron a los ojos en los cuales se veía la preocupación, mientras que la pequeña se apegaba a su madre adoptiva.
-Mientras-continuo la voz- debemos encontrar a los dos otros portadores. Debemos arrebatarles las esmeraldas antes de que se den cuenta la conexión que tienen.
-¡Es tan simple! –Dijo la desconocida voz- Les recuerdo que para encontrar una esmeralda se necesita otra.
-Estúpido-dijo Mephiles- yo puedo localizar la energía Chaos. Siento que hay una gran concentración de poder cerca de Mistic Ruins y sus alrededores. Seguramente el portador nunca se separa de su esmeralda.
-Bien-dijo Nazo, al parecer con una sonrisa- Scourge, iras tú a buscarla.
-Con q-!-queja que no pudo terminar el erizo verde ya que se vio interrumpido por el celeste.
-Iras y punto. Con los poderes que te dimos no serás detectable para la esmeralda del portador. Mientras con Mephiles buscaremos a Metal Sonic.
-¿Al robot del gato azul? ¿Para qué?-pregunto con insolencia el de gafas de sol.
-Por si Sonic y sus compañeros vienen a interferir en nuestro planes. Él y yo somos los únicos que hemos estado a punto de acabar con Sonic.
En los arbustos los dos erizos adolecente estaban más pálidos que Rouge y la pequeña Rose, al oír el nombre del robot malos recuerdos llegaron a ella, saco su esmeralda.
Tranquilidad. Paz.
Se acercó más a los otros dos erizos. Para escuchar más.
Crack
Scourge lo escucho. Se giró hacia el lugar donde se quebró la pequeña rama.
-¿¡Quien anda ahí!?-Gritó, mientras Mephiles creaba una bola de energía para disparar a los que estuvieran por ahí.
Entonces vieron a Sonic pasando por ahí.
-A ver, a ver...ya le he pateado el culo a Eggman, he ayudado a Tails con sus experimentos raros, he encontrado a Cheese, he jugado a las muñecas con Cream, he molestado a Knuckles... ¿qué más?-Dijo el erizo azul.
Los tres villanos, al reconocer a Sonic, se esfumaron de ahí en menos que canta un chao.
Sonic vio al trio, escondido entre los arbustos, y para suerte de estos tres, no le pareció extraño.
-¿Qué hacen ahí? ¡Ni que se escondieran de alguien!
-¡Hey, Sonic! ¿Qué tal? Terminaste con tu recorrido de hoy por lo que veo-dijo Blue levantándose de su lugar para ir al lado de su mejor amigo
-¿Vienes a molestar a los animales del bosque con tu compañía?-Dijo la eriza cyan mientras se levantaba y ayudaba a su hija a hacerlo.
-Ja. Ja. Ja. ¿Te comiste un payaso con azúcar al desayuno  o qué? –le pregunto con fastidio el de ojos verdes
Clic. La palabra.
-¡Mi azucaaaaaaaaaar! – dijo sollozando falsamente mientras se recargaba en el hombro de Blue, quien con cara de cansado le daba unas cuantas palmadas en la espalda en signo de consuelo.
-…. –solo miraba a su amigo de ojos verdes- Dime Harriet, ¿No que tenías una reserva de azúcar?
La eriza levanto la cabeza y empezó a pensar….
-………………-abrió la boca para decir algo-……-el cerro y la volvió a abrir- Si….pero solo Yoel tiene la llave y no me la va a querer dar.
Sonic, aprovecho para reírse de su cara sabiendo que la pagaría caro, muy caro.
Blue se moría de la risa interiormente, no quería ser víctima de una venganza, otra vez.
Claudia sabía que se terminaría mal, lo sabía muy bien.
El azul, se dio cuenta de la cara de Harriet (cara de asesina, digna de Chess) y decidió callarse por su bien mental y físico. Pero algo le llamo la atención.
Un brillo. De color Rosa. En las manos de la hermana de Amy.
-¡¿Qué es eso?! ¡¿Una esmeralda?!¡¿De color rosa?! ¡¿Como la conseguiste?!
Preguntas. Sin respuestas. Pero seguía preguntando.
Los portadores se estaban desesperando, no podían responderle, por su bien.
Una idea, no brillante. Era una idea idiota, pero al fin y al cabo una idea.
-¡Cállate de una maldita vez!-grito, acompañado de un golpe en la nuca.
Silencio.
-¿¡PERO A TI QUE DEMONIOS TE PASA?!-Le grito Blue (histérico) a Harriet, la cual se tapó los oídos.
-OOOOOOHHHH!! ¡No sé! ¡¿A TI QUE TE PARECE?!
Y antes de que se empeorara la situación, la más madura y calmada en ese momento los interrumpió…por no decir regaño
-¡SILENCIO LOS DOS!
Silencio. Acompañado de mejillas rojas de vergüenza.
-Si no lo hubiera hecho, estaríamos en problemas con sus preguntas.-le dijo a Blue la portadora rosa.
-¡Pero no le hubiera pegado tan fuerte!
-¡Merecido lo tiene por idiota!
-¡No lo es!
-¡Si!
-¡No!
-¡Si!
-¡No!
-¡Silencio ustedes dos!-una nueva voz vino a la conversación. Con un ligero toque fantasmal.
-¿Y ahora qué pasa con estos dos, Yoel?
-Simple, Harriet le pego a Sonic porque hacia demasiadas preguntas-contesto Blue a los dos hermanos fantasmas
-Siempre usando el cerebro, hermana.
-¡Bien hecho! (nótese la ironía)
Con el tic en el ojo, la eriza de color turquesa se controlaba para no convertirlos en cubitos de hielo en ese mismo instante.
-¡Pero Sonic hacia muchas preguntas sobre la esmeralda rosa!-defendió la Claudia.-Si las hubiéramos respondido, tendríamos que haber explicado lo de los portadores.
Silencio.
Sonrisa de victoria.
Lengua fuera de la parte de la eriza mayor.
-Por eso la quiero tanto- abrazando a su hija mientras los hombre las miraban con cara de derrotados.
-Y cuando se levante, ¿Qué le vamos a decir?-pregunto Henry, con la sonrisa en la cara.
-Ahí es donde ustedes dos entran- señalando a sus hermanos- Entran en su mente, le borran o sustituyen el recuerdo de la esmeralda rosa y antes de que despierte nos largamos de aquí.
-¿Todos o…?- Blue y sus preguntas no tan inútiles.
-No, Henry, Yoel y yo nos iremos. –Se miraron preocupados- Es mejor limitar nuestros encuentros… Cada vez se nos hace más difícil esconder lo de los portadores y las esmeraldas que Sonic no conocía la existencia. Sera mejor que solo nos veamos cuando sea necesario.
-¡NO!-Se reusaba la pequeña, su hija. La abrazo, con todas sus fuerzas- no quiero sepárame de ti, quiero que estemos juntos, los tres y los demás portadores.
-Yo también quiero eso, pero es lo mejor para nuestro bien ARF –dijo la eriza secándole las lágrimas que amenazaban con salir. –Usaremos los comunicadores que Exe nos dio.
Y la volvió a abrazar. Pero Blue se unió, dándole a la rosa una sensación de tener una familia.
-Cuídate Harriet, y a los demás. Yo me encargo de pasarles el mensaje Noah y Katy. –Dijo Blue, rompiendo el abrazo- Yo cuidare de Clau.
-Listo-interrumpió Yoel- Ya es hora, se despertara en cualquier momento.
Asintió con la cabeza y sintió como las auras de sus hermanos se fundieron con la suya. Se elevó con el viento y se alejó de ahí…. Mirando hacia atrás y agitando la mano.
Una lagrima se resbalo por la mejilla de cada eriza.


sábado, 23 de noviembre de 2013

Capitulo Primero ~

Hola hola! *agitando como desquiciada la mano*
Que tal ? Por fin, traigo el primer capítulo!. Lamentablemente para los impacientes (incluyéndome) se demoraran un poco-mucho y estarán compuestos de tres partes: tres equipos se lo dividieron, pero los demás tendrán el siguiente capitulo para ellos o3o
Me entendieron? supongo que no x)

Anyway! Los dejo con el capitulo:
Primera parte escrita por Red Rose y Yellow Light
Segunda parte escrita por White Projest y Black Ilusion
Tercera parte escrita por Double Purple 

PD: La encuesta la hago sobretodo para aquellos que no tienes cuenta Google y así, si tienen Facebook, puedan estar al tanto de lo que sucede por aquí... aparte que subiríamos fotos mas seguido ^^

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 ~ Primera parte:  A Prueba ~

Avanzó por los pasillos de GUN, luego de tener una charla intensiva con Claudia y Harriet. Suspiró hondo y se dirigió por los pasillos a la sala del jefe de GUN, un joven altruista y guapo, bien dotado al que seducir, no era trabajo complicado.
Tras arreglarse un poco su camisa para resaltar sus atributos y echarse una mirada intensa para ver si hay fallos, empezó su plan.

-¿A dónde vas Noah?- la voz con toque de curiosidad de Rouge hizo que se detuviera, suspiró hondo y empezó a pensar en una excusa mientras se giraba para verla a ella, aunque para su sorpresa no estaba sola. Shadow la acompañaba.
-Eh... esto...- se empezó a ruborizar por la vergüenza de que ninguna mentira para encubrirse saliera de sus labios.
-Ah, ya sé- sonrió altivamente -Quieres ligarte al jefe.
Buena idea. Pensó Noah para sí.
-Eh, sí, eso mismo- dijo con una sonrisa dulce y llena de inocencia.
-Sí anda, búscate a otro, el es mío- replica Rouge con tono de broma.
-¡Ey! Me lo he pedido yo antes- ríe Noah.
-Bueno, solo por ser tú eh-
-Bien, ahora me voy- dedico una mirada a Shadow y le sonrió, este solo hizo una mueca de desagrado y se marcho sin devolverle el gesto o simplemente asentir.

"Se ha enfadado, más me vale que merezca la pena..." caminó rápido hacia el despacho, sonrió al director jefe y comenzó a coquetearle, él decidió ayudarla dándole la llave de los informes para que pudiera investigar por su cuenta y le dio permiso para preguntar a agentes de alto rango que vieran a Katy en acción, aun no sabía mucho de ella, por eso mirar sus datos sería de gran ayuda.
Salió del despacho del jefe y se dirigió a los archivos para revisar todo aquello, entro en la sala y cerro la puerta bloqueándola desde dentro para que nadie la molestara.

-Tengo trabajo-

Sacó sus gafas, con las que se puede decir que cambia de personalidad y empezó a investigar, busco en los archivos de la letra K, ni rastro, luego busco en la L, de Light, tampoco. Empezó con la H, nada y en la T, no había ninguna Katy Light The Hedgehog. Suspiró pesadamente y se cruzó de brazos molesta.

-¿Dónde estarán sus datos? Parece un fantasma- se quejo.

Reviso la sala entera, en busca de algún ordenador, nada.

-Joder, es que no pueden ordenar esto algo mejor-

Camina hacia las estanterías de la ala oeste y rebusca por encima, no hay mucho, hasta que se fija en una hilera de estanterías metálicas llenas de carpetas.
-Shadow The Hedgehog, Rouge The Bat, Noah The Hedgehog, Katy Light The Hedgehog, Albert The Hed...- se paró y volvió al penúltimo.
¡Katy Light The Hedgehog! La había encontrado, pego un saltito y cogió la primera carpeta, la de Shadow y la de Katy. -No solo gano uno, si no que mato dos pájaros de un tiro, saber sobre Shadow y saber algo más sobre Katy.

Comenzó a examinarlo todo, leyó cada letra, cada signo, cada cosa que podía darle pistas sobre Katy, conoció sus habilidades, sus objetos y armas, sus características en combate, su procedencia en blanco, sus apellidos, y una foto.
Tras acabar coloco uno de sus robots que almacenaba información de cualquier cosa, bien fuera una pared, la examinaba y recogía sus datos, o un libro, que copiaba todo lo que había en él.
Sonrió victoriosa y aparto su historial luego de meterlo en su carpeta, y comenzó a leer el de Shadow, se sintió una espía secreta pero... ¿que más da? Ya había cometido una falta de respeto, una más no se nota. Tras acabar de leerlo y salir algo confusa pero feliz, salió del laboratorio cerrándolo, camino de nuevo hacia el despacho del jefe y le dio la llave a su secretaría.

Hora de un descanso.

Se sentó en la cafetería luego de coger algo para comer y aliviar a su estómago, tomo un trago de coca cola y espero sentada en su mesa y observando por la ventana. Cuando vio pasar a los veteranos no se pudo resistir a cumplir de una vez su misión.
-Ey, ey, chicos, acercaos-
Los chicos se miraron entre sí y se encogieron de hombros para caminar hacia ella. Cuando ya estaban cerca. Noah comenzó el interrogatorio luego de enseñarles un justificante del jefe con orden a responder a sus preguntas.

Los chicos se sentaron y comenzaron a contarle cosas sobre Katy que no aparecían en su ficha, como por ejemplo su carácter y su valía. Para ser de rango bajo a ella y a los veteranos era bastante buena por lo que contaban, Noah sonrió tras escucharlo todo, al parecer en varias misiones le tocaba con Shadow y Rouge, se sintió feliz y decidió hablar con ella lo antes posible. Para su suerte, la chica que buscaba y que hoy había estado en sus planes paso por delante de ella.
-Perfecto- murmuró mirándola fijamente,
Sonrió y corrió hacia ella, cuando estuvo lo suficientemente cerca y vio que se sentaba sacando su almuerzo, decidió comenzar.
-Hola-
La eriza levanto su vista a la de Noah.
-Ho-hola- dijo sorprendida.
-¿Katy Light The Hedgehog verdad?-
Asintio y con los ojos como platos la miro diciendo -¿No-Noah The Hedgehog?-
-Si esa soy yo- dijo sentándose frente a ella.
-Te conozco, eres muy conocida por aquí, eres genial- musito esto último.
Noah rió entre dientes y le sonrió -Vaya muchas gracias, la verdad es que me aburro mucho y yo también he oído hablar de ti, ¿qué tal si nos vamos a dar una vuelta juntas luego de que almuerces?
Katy asintió rápidamente y acepto.

~0~0~

Los meses habían pasado, en varias ocasiones Noah se había acercado a Katy mientras se ganaba, un poco, su confianza. Aquel día, por los pasillos del aquel edificio una eriza de ojos cafés se dirigía a la oficina del jefe que por alguna razón le había pedido su presencia con urgencia, eso era raro, alguien de bajo rango no era llamado así y menos por el jefe de la organización. Al llegar al final de aquel corredor observó la puerta con algo de miedo. La intriga la invadió y miles de pensamientos cruzaron su mente.
"¿Qué deseara el jefe de mi?, ¿Abre cometido algún error?, ¿Tal vez me despida?" La depresión la rodeo. "bueno…sea lo que sea…será mejor que entre…"
Suspiro derrotada, llamo la puerta para luego escuchar un "adelante", tomo un poco de aire y entro al despacho para ver al jefe sentado escribiendo en su escritorio muy concentrado.
-¿mando llamarme, jefe?
- ah…si- la miro levemente para luego seguir escribiendo -Toma asiento- le indico lo cual ella acato sin decir palabra.
Pasaron unos minutos mientras el director aun escribía en aquel extraño cuaderno, cuando término le miro seriamente.


-Te he llamado llamar porque te asignare una misión de clase A– levanto la vista y le entrego unas carpetas que había sacado de su escritorio. -Esta es tu misión- Le entrego la carpeta, suspiro y continuo -Deberás ingresar al cuartel de Eggman y traer cierta información de su ordenador central para eso deberás evadir su seguridad y traer la información, aquí encontraras la información con el nombre de "EMPERE CALITOP"- Levanto la vista para observarla -¿has comprendido?-
-Es una misión bastante simple– hablo mirando la información -Solo que habrá que tener cuidado de no llamar la atención- levanto la vista ojeando al jefe.
-No creas, es uno de los cuarteles más vigilados de Eggman ahí oculta todo tipo de información "clasificada"- hablo seriamente –Saldrás esta misma noche se paro y le entregó una carta, al recibirla observo que era el permiso para tomar cualquier equipo táctico de élite de la organización, solo agentes como Shadow, Rouge y Noah tenían ese permiso especial. Por lo que debía sentirse afortunada.
-Puedo preguntarle algo…- dijo dudosa, el jefe asintió -¿Por qué me asigna algo como esto?- le miro confusa
El jefe la miro sorprendido, y Katy continuo. -Soy de bajo nivel, y me manda a una misión así- Respira hondo y continua de nuevo -Bueno… quiero decir, ¿no es mejor dársela a los de élite?
-Sería lo más elocuente, pero están en misiones…- suspiro -Además tus informes son interesantes- sonrió levemente- Estoy seguro que eres capaz de hacerlo… buena suerte repórtate para que te den lo esencial y luego prepárate para salir.
 -Si jefe- se levanto de su asiento y miro a su jefe a los ojos. -No lo decepcionaré- le dijo firme para irse de ahí. Cerró la puerta al salir y suspiro 
–No creí que me dieran una misión tan importante– Miro al suelo impresionada -Será mejor ponerme en marcha- dijo Katy alejándose por el pasillo para comenzar a poner en práctica su misión.

-0-0-


En la cafetería una eriza de ojos rojos y pelaje rosa de púas moradas almorzaba aburridamente, ya que su amiga Rouge y su "amigo" Shadow estaban de misión, miro por la ventana todo el mundo conversaba de cosas triviales nada interesante que oír ni tratar de instalarse en una conversación, claro, según ella, hasta que escucho una conversación interesante detrás de ella. Puso sus orejas y comenzó a escuchar interesada.
-¿En serio...le dieron una misión de tipo A?
- Bueno dicen que es muy buena en lo suyo- hablo un león mientras comía.
-Quizás lo sea, pero ella es de rango menor al nuestro ¿por qué no nos lo pidió a nosotros o alguien de nuestro rango?- hablo molesta una coneja de color café, el león solo levanto los hombros sin darle importancia.
-No te quejes- le reprendió una iguana de ojos zafiro, - Ella es muy buena en su trabajo- comento mientras comía unas galletas -Además si te lo dieran a ti en seguida caerías en alguna trampa- se mofo haciendo que se enojara y frunciera el ceño.
Noah interesada se giro hacia atrás para verlos a todos. -Disculpad que sea tan metiche y haya escuchado vuestra conversación e interrumpirla incluso, pero... ¿de quién estáis hablando?- pregunto inocentemente Noah con una sonrisa amable.
-Ahhhh...bu-bueno señorita Noah- hablo nervioso el León
-De la agente light Hedgehog- Se adelantó la de ojos zafiro al ver el tartamudeo de su amigo el león.
-Vaya sorpresa...- sonrió -Con permiso y muchísimas gracias por la información guapos- les guiñó un ojo y se levanto a paso lento. Rodeada por dos chicos que siempre la seguían.
-De-de nada señorita Noah- la miraron impresionadas, ya qué, que un agente de rango élite les haya dirigido la palabra es casi imposible.
Asintió con una sonrisa y se encaminó a fuera, cortando a esos chicos para que la dejaran respirar. Cuando ya se miraron salió sonriente -Tendré que pedir una favorcito más a nuestro jefe- sonrió divertida para salir de la cafetería.

-0-0-

-Bueno...- suspiro observando todo -Tengo todo esto listo- comento, tomando su equipo para salir con rumbo a su misión estaba por subir a una de las motocicletas que le asignaron.
-Agente light es bueno encontrarla- la eriza se volteo confundida al ver al jefe y se quedo quieta esperando algo de su parte.
-¿sucede algo? Ya estaba por irme a la misión-
-No, nada, solo que he reclutado a un agente de elite para la misión- Al escucharlo, Katy se desilusiono, ya tenían sustituta para ella, alguien más experto y ya no podría hacerlo -Tendrá un compañero para esta misión- eso sorprendió a la eriza para ver al agente que le acompañaría y ver a una silueta conocida.
-¿Noah?- le miro confusa al verla junto a su jefe.
-Así es... seremos colegas en esta misión- sonrió divertida.
-Bien, buena suerte a ambas- se giro para ver a Noah -Confió en ti, Noah. No me decepciones, tu tampoco The Light-
Ambas asintieron y Noah la miro a los ojos. -¿Lista para irnos?- Katy asintió -Bien, pues vamos- tomaron sus transportes y se fueron de allí para comenzar su misión.

-0-0-

Al llegar observaron el edificio ambas se miraron y asintieron para empezar el asalto, obtener la información no fue difícil para ambas y menos entrar rápidamente, con las estrategias de entrada que había dado la eriza de ojos café, no fueron detectados al ingresar al edificio y estar paradas frente a la computadora central.
-Buscaré los archivos- le dijo mirado a la eriza rosa o cual asintió, para ponerse a vigilar en los lugares cercanos.
-Es bastante buena para infiltrase y tiene conocimientos de computo y hackear, impresionante- susurró la eriza mientras vigilaba y revisaba a Katy. "pero eso no es importante" pensó, se giro levemente para ver a su compañera tecleando en la maquina buscando la información. "Debo hacer que use su poder junto con la esmeralda para comprobar mis dudas sobre la conexión que posee" se dijo a si misma, miro seriamente a Katy. "¿Pero cómo?" Pensó frustrada mientras se mordía una uña para observar todo a su alrededor, hasta que vio unas cámaras de seguridad al otro extremo haciéndola sonreír "se supone que este lugar tiene una gran seguridad, y como los hemos evadido con facilidad" sonrío con malicia "¿qué pasaría si esta vez salimos con algo de dificultad?" se rió levemente.
-Ya he terminado – le hablo detrás de ella mirándola confusa por su sonrisa -¿todo está bien Noah?
- claro- sonrió -Hay que irse, entonces- dijo caminando por el sentido contrario por donde habían entrado.
- Noah, ¿no es mejor irnos por donde entramos?
-Eh...si… pero… debo buscar algo primero antes de salir- la miro – ¿vienes?- hablo mientras entraba por un pasillo del lado izquierdo, la eriza suspiro para luego seguirla.
-¿Qué buscas exactamente tal vez con los esquemas del lugar te sea más fácil?– comento sacando el mapa del lugar.
-Descuida… yo sé lo que busco y donde está, tu sígueme y todo saldrá bien- le sonrío la eriza solo asintió para seguirla "te tengo"- pensó con una mirada llena de malicia.
Caminaron por corredores donde estaba bastante protegido por cámaras de seguridad las cuales no fueron difíciles de evadir, pero también había trampas ocultas más peligrosas que la anterior, los cuales fueron evadidas por milagro por la eriza de ojos café, al ser accionadas por "error" por su compañera.
-Noah ¿qué te pasa casi me mata esa trampa de afiladas cuchillas?- La confronto la eriza
- upps- le rió nerviosamente -Fue mi equivocación jeje-
-Una, dos o hasta tres veces puedo tomarlo como una equivocación pero ¿diez veces?– le miro molesta -te quieres deshacer de mi-
-No seas tonta katy- Agito su mano quitándole importancia a la situación, haciendo que la eriza solo suspirara resignada.
"Es buena hasta los robot los elimino sin ayuda de la esmeralda" le miro de pies a cabeza "tal vez no la tiene la esmeralda consigo" entrecerró sus ojos molesta.
-¿podemos continuar?- la miro. -Ya ha amanecido y debemos entregar la información- le apuro la eriza negra.
-Bien– hablo resignada Noah, Katy paso primero para que Noah la siguiera molesta por su plan que había fallado, estaba tan distraída que acciono una trampa oculta en el piso haciendo que el piso se abriera debajo de ambas para caer en ella.
-Aaaaahhhhh Noah ¿que hiciste?– le urgió la eriza al tocar el agua.
-¡Esta vez no fue intencional!- hablo tratando de defenderse.
-¿Cómo que intencional?- la miro molesta la eriza para que Noah se pusiera nerviosa.
-pues veras…- dijo Noah mientras presionaba su indice derecho con el izquierdo -Te estaba poniendo a prueba- rió nerviosa
-¿ A prueba? ¿Queriendo que me mataran esas trampas?
-Vale...- suspiro resignada -Tal vez me pase un poquito-
 -¿Un poquito?- la miro molesta.
-Bien perdón... ¿qué tal si lo discutimos después de salir del pozo de cocodrilos? Mis brazos me están cansando- le dijo mientras se aferraba a unas púas que salían de la pared para escalar.
-Bien- le dijo del mismo modo.
Salieron escalando para salir del lugar exhaustas de aquel pozo.
-Un pozo con cocodrilos… Eggman se te están acabando las ideas- rió divertida mientras hablaba sola -Con razón Sonic lo derrota tan fácil- rio de nuevo, divertida.
-Hhmmmp… es mejor salir de aquí ya- la miro molesta para mirar la salida de ahí.
-¡Oh, vamos no te enfades!
-¿Cómo se que todo esta misión no fue un plan tuyo para ponerme a "prueba"?- se cruzo de brazos molesta, abriendo la puerta de golpe sin desactivar la alarma haciendo sonar las alarmas con fuerza, haciendo que ambas se taparan las orejas.
-Esto no ningún plan es una misión real – le grito, para que luego las sirenas se callara de golpe -uh… ¿Pero que paso? ¿Qué hiciste por primera vez, Katy?- pregunto Noah.
-¿Es una plan tuyo? ¡Porqué yo no he echo nada!-
-No es cierto, la misión es real yo solo le pedí un favor al jefe- el suelo empezó a templar con fuerza
-Es un plan esto, ¿cierto?- le susurro al ver el semejante robot que salía debajo de la tierra de gran tamaño y dureza.
-No… te juro que no es mi idea, te lo juro por mi rango superior de élite- susurro -Cuidado- la advirtió.
Ambas esquivaron la máquina cuando las ataco con fuerza, Noah lo atacaba con fuerza haciéndole unos leves rasguños, katy iba igual, ambas usaron su poder combinado haciéndole una grieta en su fusilaje.
Ya era de día y aun esquivaban esa cosa, el ataque que lo daño no pudieron repetirlo porque la maquina evitaba ese tipo de combinaciones de poder, cosa que lo dificultaba todo. Katy sabía que Noah no usaba su poder todo, por eso frunció el ceño.
-Ya me canse– hablo la eriza mientras sacaba la esmeralda amarilla de su bolsillo.
"¡LA TIENE! ALABADO SEAS CHAOS" pensó Noah.
La eriza acumulo todo su poder junto con la piedra pero el ataque no se pudo realizar, ya que la esmeralda funcionaba para dar incremento a su poder pero esta fue demasiada que mando a volar a la eriza unos metros detrás adolorida.
-Pero ¿qué paso?- miro la esmeralda que estaba a su lado -No funciono…- dijo con tristeza y confusión.
-Ya vi suficiente- hablo seriamente Noah -Es mi turno- saco su esmeralda roja para luego invocar un inmenso poder que de un parpadeo dejo al robot destrozado -¿Estas bien?- se le acerco, ayudando a levantarla.
-Eso creo-
-Es mejor irnos- dijo Noah saliendo de allí.
El camino de regreso fue silencioso hasta que llegaron con el director y le dieron la información y contaron levemente como fue la misión, al salir cada una tomaría un camino separado o tal vez no.

-Katy- la susodicha volteo levemente para ver ah Noah dándole la espalda -Quiero verte en el bosque esta noche, a las doce, en el de Green Hill- le dijo para luego marcharse de ahí dejando a la eriza confusa.
La tarde paso bastante lenta, mientraspensaba si ir o no al bosque para ver a Noah.
-¿Para que, me ah citado ahí?- hablo mirando la esmeralda amarilla entre sus manos, para luego mirar el techo de su habitación.
Giro levemente la cabeza para ver el reloj que tenia junto a su cama -pronto anochecerá- se levanto de la cama para salir de su habitación.
Al llegar al bosque espero unos minutos hasta que anocheció.
-Viniste- escucho, para luego ver a Noah saltar de un árbol acompañada por otro erizo de color azul.
-¿Por qué querías que te viera aquí?- miro curiosa al erizo que la acompañaba.
-Pues veras…
Pasaron un par de horas de explicaciones sobre portadores, poderes especiales, una organización, todo confuso pero a la vez fascinante que hizo que el interés de Katy despertase, también entendió porque las pruebas de Noah y acabo por dejar de desconfiar de ella. Sonriéndole ampliamente, cosa que fue devuelta.
-haber comprendo...– Los miro -¿Queréis que me una a vosotros?
-Así es- hablo el erizo de nombre Blue.,
-¿Qué dices te unes?- le pregunto la eriza rosa, pasaron unos minutos por lo cual pusieron algo ansiosos a ambos erizos.
-Me uno- les sonrió
De ahí en adelante la siguiente misión que tendríamos seria buscar a los siguientes portadores para que se unieran a este Team.


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~ Segunda parte:  Dilemas ~

Era una mañana normal, un día como cualquier otro en el mundo... Sin preocupaciones y sin pensamientos que invadieran la mente de las personas de algo innecesario. Pero esa mañana no era igual para un erizo, un erizo dorado de capa negra que llevaba posicionado en su cabeza una capucha de esa misma tonalidad. A sus lados estaban dos chaos, uno era de color naranja y ojos rojos y el otro, era blanco y de ojos azules. Ambos estaban jugando y haciendo mucho ruido, pero el erizo dorado ya se había acostumbrado a eso.

Una duda transcurría en su serio pensamiento, hace pocos días que la llevaba con sigo, una pregunta sobre esas joyas de poder infinito, las Chaos Emeralds, y también de aquellos que eran los llamados "Portadores" de éstas gemas. Tenía que responder ese dilema de cualquier forma, debía saber y calmar esas ansias. ¿Pero quién podría responderla? Eso era algo que él no sabía y al final se convirtió en otra pregunta mental que se repetía en cabeza una y otra vez, junto a otras dudas y cuestiones que ya tenía desde hace días.

Un suspiro salió de su boca, una idea iluminó su cabeza, se trataba de ir con la portadora de la esmeralda cyan, Harriet The Hedgehog, a que le diera esas respuestas. Llamó la atención de sus chaos, los cuales estaban entretenidos sin enterarse de nada, y comenzó a caminar a un lugar en el que podría encontrarla, su casa-cuartel.

Avanzó por la vereda y tras un tiempo pudo divisar a lo lejos la casa de la eriza de ojos bicolor, un suspiro y un gesto serio se posaron en el rostro de Astro The Hedgehog, quien continuo con su camino. Al llegar, llamó a la puerta, pero como nadie le abría, decidió entrar sin permiso. Al entrar se dio cuenta de que no había nadie, o al menos, eso es lo que él creía.

Sus párpados se entrecerraron, dio media vuelta para irse del lugar, pero, en ese instante un estrepitoso ruido sonó en la casa, llamando por completo la atención del erizo. Se dirigió sigilosamente hacia la parte donde se originó el sonido. Al estar cerca de la puerta de esa sección, agarró cuidadosamente la perija y en un segundo abrió velozmente la puerta, dándole así una vista de lo que se encontraba del otro lado.

Pudo ver a un erizo azul de ojos verdes, prácticamente idéntico a Sonic. Astro supo que no era Sonic, ya que las zapatillas que llevaba no eran iguales y llevaba un cinturón puesto. El erizo azul se encontraba en el suelo teniendo en sima y a su alrededor un montón de papeles. El azulado se sorprendió de la repentina aparición de Astro, poniendo en su cara un gesto de notable asombro. El erizo dorado se dio cuenta de cómo se encontraba el aquel erizo y votó a ayudarle a levantarse dándole la mano en señal de ayuda.

—Gracias por la ayuda, Astro —le dijo el erizo mostrando una sonrisa.

—¿Cómo sabes mi nombre? —exclamó un tanto sorprendido, ya que él no conocía al erizo que tenía en frente.

—Trabajo con Harriet, soy el técnico y el que archiva información de los portadores en el Seven Chaos, por eso lo sé —se agachó, agarró unos cuantos papeles y los acomodó dentro de un cajón.

—¿Te ayudo a recoger? Entre dos acabaremos antes —dijo mirando el desorden.

—Por supuesto —pronunció alegre el erizo.

Los dos erizos se pusieron a poner orden a la devastada habitación llena de papeles y uno que otro objeto del suelo. No tardaron mucho en poner las cosas donde debían estar. Exe se acercó al erizo dorado con una gran sonrisa.

—Por cierto me llamo Sonic X The Hedgehog...pero me puedes decir Exe, es mucho más corto— añadió Exe.

—Encantado, Exe — dijo mientras se quitaba la capucha, dejando ver su rostro.

—¿Te gusta mucho ocultar tu rostro? —preguntó el erizo.

—No es que me guste, lo prefiero así...

—Ok —miró la capucha de Astro—. ¿Astro que te ah traído hasta aquí?- pronuncio con ligera curiosidad—, ¿Venias a ver a alguien? —concluyó.

—Pues... venía a ver a Harriet para que me explicara todo esto de los portadores, pero veo que no está —respondió con tranquilidad.

—Sí, es que Harriet salió, pero si quieres yo puedo explicártelo —aclaró al mismo tiempo que acomodaba otro papel.

Astro aceptó y Exe lo dirigió hacia la sala para que estuvieran más cómodos en su plática. Los dos se sentaron en un sillón bastante grande.

—¿Cuáles son tus dudas? —dijo mientras agarraba un cojín.

—¿Cuál es la función de los portadores? —preguntó mientras señaló el sillón y sus chaos se sentaban en el sitio.

—Pues en sí, es cuidar de las Chaos Emeralds, de que estén bien y que no caigan en manos equivocadas —exclamó tranquilamente.

—Entiendo —dijo al mismo tiempo que sacaba la esmeralda negra de su capa—. Entonces hice bien en quitarle a Mephiles esta esmeralda.

—Claro que sí. Al ser portador debes proteger la esmeralda que se te ha asignado, es lo que todos los portadores deben hacer.

En ese instante un pequeño robot sale y se pone en frente de Astro, grabando y tomándole fotografías a la esmeralda negra de éste.


—¿Y quién es ese? —preguntó señalando el pequeño robot.

—Es Vitaly, mi pequeña cámara personal, y por cierto le encanta su trabajo —hace a un lado a Vita.

—¿La creaste tú? —preguntó mientras guardaba su esmeralda.

—Sí, ya tiene tiempo que la cree —estiró un poco los brazos y bostezó—. Fue después de que ya no estaba del bando de Eggman y me fui por mi propio lado —recargó la cabeza en su mano.

—Yo siempre he estado del lado que he querido...

—¿Y cuál es ese lado?

—Pues a veces del lado de los buenos... otras de los malos... otras de doble agente...

—¿Y eso a que se debe? —exclamó con asombro e interés.

—Pues... porque no me gusta hacer lo mismo seguido. Pero ahora tendré que estar del bando de los buenos sí o sí.

—Oh… pensé que era por problemas que habías tenido en el pasado —movió un poco la cabeza—, ya que eso influye en algunos casos.

Astro se quedó callado por unos minutos. ¿Problemas en el pasado? Muchos, y eso de recordar lo que pasó hace tantos años le dolía demasiado.

—Si por problemas... —habló después de un largo silencio con la cabeza agachada—, también fue —completó la frase con la voz ligeramente quebrada.

—Sé que no me incumbe pero, ¿qué fue lo que sucedió en tu pasado?

—Pues... son muchas cosas ya —dijo levantando la cabeza y mirándolo a los ojos— Puedo contarte mi pasado si quieres.

—Será un placer —habló con seriedad.

—Pues... yo nací con una enfermedad muy rara, y cuando eso paso... —dijo quitándose el guante de su mano izquierda dejando ver en el dorso una marca en forma de sol—, esta marca apareció en mi mano.

—Una marca de nacimiento, creo que te entiendo —agarró por un momento su brazo derecho—...continua.

—Bien, a los cuatro años... fue cuando ocurrió todo lo que te voy a contar ahora.

—¿Que sucedió? —preguntó un poco impacientado.

—Para empezar... mis padres fueron asesinados delante de mis ojos... —contestó con la voz quebrada.

—Eso debió ser horrible, bueno eso creo yo, ya que nunca tuve —dejo de hablar para no completar la frase—...lamento lo de tus padres.

—Tranquilo, no fue tu culpa y ocurrió hace muchos años ya... Yo tuve suerte de haber escapado y salido con vida.

—¿Y tienes alguna idea de quien fue el asesino?

—No, pude ver su cara cuando tenía cuatro años, pero no me acuerdo de cómo era, ni siquiera le conocía.

—¿Pero, quién pudo haber hecho eso? —Se quedó pensativo— me inquieta saberlo, y en especial que tu sepas quien fue el responsable de ese sufrimiento.

—No me acuerdo de su cara. Solo sé que me quedé inconsciente y aparecí en el hospital cuando desperté.

—Muy interesante —puso su pulgar en su barbilla— tus padres fueron asesinados, viste la cara del sujeto pero como te desmayaste misteriosamente no te acuerdas, esto es algo inquietante —junto sus manos para luego mostrar una cara de interés por el pasado del erizo—...y sobre todo tu marca de nacimiento.

—En ese hospital estuve hasta los siete años, que fue cuando me escapé de allí, en el bosque conocí a estos dos —señala a sus dos chaos—. Y empecé a entrenar...

Exe inhaló profundamente y después exhaló con lentitud.

—Astro tu pasado se ve que ha sido duro y lleno de dudas por todas partes...

—Lo sé, pero todo ocurrió tan rápido...

—¿Qué dirías si te digo que te ayudare a descubrir quién mató a tus padres? —exclamó con tono serio mientras veía a Astro.

—¿De verdad puedes hacer eso? —preguntó mostrando algo de sorpresa.

—Soy un experto investigando, así que sí podré hacerlo... pero tomara tiempo —aclaró Exe.

—Con razón sabías quien era... —dijo mirándolo serio—. Yo soy un buen espía, casi nunca me pillan.

—No lo dudo, Astro.

—Creo que no te presenté a mis dos chaos... —dijo al mismo tiempo que miraba como los dos dormían tranquilamente—. El naranja es Llama y el blanco es Aqua.

—Se ve que son bastante inquietos...se ven lindos, jeje —pronunció al mismo tiempo que los observaba—. Entonces, ¿Aceptas mi ayuda?

—Claro —dijo acariciando suavemente la cabeza de ambos chaos—. Y sí, son bastante inquietos, no pueden estar un día sin gastarme una broma.

—Astro, espero que encontramos al culpable y formemos un gran equipo —extendió su mano hacia el erizo dorado.

—Por mi vale —dijo estrechándose la mano con Exe.

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~ Tercera  parte:  Humedad ~

Humedad.

Fluidez.

Fuerza.

Así era cómo debía haberlo hecho. Estaba jadeando de cansancio: semi arrodillada en el piso, el sudor frío caía por su cara como si se tratase de una lluvia torrencial. Había estado practicando por horas, como era costumbre, esos poderes que no llegaba a asimilar del todo. Pasaron dos años, ya Stefi tenía veinte, pero aún no se sentía capaz de hacer algo que su maestro de artes marciales pudiera categorizar como “fenomenal” o “impresionante”.

No es que su maestro tuviera un claro conocimiento del poder Chaos. Pero afirmaba que, si ella era capaz de tenerlo, debía hacer cosas increíbles con él.
Pero la zorra de pelaje violeta se sentía incapaz de ello. Aún así, no dejaba de entrenar. Ni un ápice.

— ¡Hey! ¿Sigues ahí? ¡Ya es tardísimo!

Ella se volteó, con lentitud: su vista cruzó a un zorro de pelaje rojo oscuro e intensos ojos dorados. Era su mejor amigo, Gaeity.

—Ah, sí. No he visto la hora —respondió ella, entrecortadamente y sonriendo—. Sí, es tarde… —y miró el oscuro cielo sin luna—. Haré un poco de relajación y luego iré a casa.

— ¿Me lo prometes, no?

—Sí —contestó ella, algo fastidiosa. A veces parecía su hermano mayor—. Iré a casa. ¿Contento?
—No del todo, pero confiaré en ti. Nunca has faltado a tu palabra —sonrieron—. Cuídate.

Ella saludó con la mano, se separaron y Stefi se arrodilló en suelo: relajó sus músculos, su mente, su ser… Se sentía sin ataduras, sin opresiones, sin nada.

Y, luego, sintió algo cálido, reconfortante: la esmeralda que viajaba con ella a todos lados. La joya le proporcionaba las fuerzas que había perdido en el entrenamiento. Suave, gentil, profunda… La animaba, la relajaba y la renovaba.

No entendía del todo la “magia” de esa piedra, pero sabía que ella era la única capaz de hacerla “funcionar”. Suspiró y, dando por terminado su relajación, se puso de pie de un salto y se puso a caminar.

No había dado ni tres pasos cuando empezó a marearse: maldita costumbre suya, se decía. ¡Siempre se levantaba del golpe cuando estaba sentada! Eso sólo le provocaba que su presión sanguínea disminuyera y empezara con mareos, pues la sangre se le complicaba llegar a la cabeza. Suele tener un dulce consigo para estos casos, pero se los había olvidado. Maldita sea…

No tuvo más remedio que agacharse, ya que un cosquilleo se le extendió por todo el cuerpo y la vista empezó a nublarse: definitivamente, iba a desmayarse, ya lo sabía. Ella conocía las reacciones de la presión baja.

—No… —logró balbucear antes de caerse, rendida, al suelo. Batalló hasta el final.

Despertó al rato. Parecía moverse.
Tenía la vista algo borrosa. De a poco, las cosas fueron recobrando forma y color exacto.

— ¿Despertaste? Mira que desmayarte en plena llanura en una noche oscura…

¿Y ése? No había otros habitantes en la isla que no fueran zorros, por lo que ella sabía. El clan de los perros vivía en otra isla, al lado. Le llamó la atención que aquél lobo la estuviera llevando en brazos.

— ¿Quién eres? —logró preguntar, algo débil.

—Pride the Wolf —contestó, con una voz fuerte y potente. En seguida, ella le notó algo que colgaba del brazo del lobo: una banda blanca con una cruz roja que parecía brillar en la oscuridad.

— ¿Eres médico?

—Enfermero —corrigió—. Vengo de Station Square, estoy en las prácticas de mi carrera y decidí hacerlas aquí. Eres mi primer paciente —dijo con orgullo. Stefi sólo suspiró—. ¿Qué te pasó? ¿Te bajó la presión? —ella asintió—. Ya, me lo supuse. ¿Qué hacías?

—Entrenaba. Hago artes marciales —él silbó ascendentemente, sorprendido.

—Con razón eres algo más pesada que otras chicas —Stefi movió un poco las orejas, avergonzada. La verdad, es que ella tenía una baja opinión de sí misma, por lo que no le molestaba que dijeran esas cosas de sí—. Era broma —le dijo, sonriendo—. Por cierto, ¿vives lejos? Así te llevo a casa.

—Puedo caminar, ya —le contestó ella. Pride insistió un poco más, pero Stefi terminó convenciéndolo, por lo que se puso de pie y empezó a caminar ella misma, aunque con dificultad.

— ¿Ves? Te acompaño —recalcó él y tomó un brazo de Stefi para pasárselo por su hombro.

—Gracias —dijo ella, con una sonrisa a medias—. No vivo lejos, es aquélla casa que ves —y empezaron a caminar, al ritmo de ella—. Por cierto, me llamo Stefi —el lobo sonrió y siguieron la caminata: ella lo vio bien, tenía el pelaje negro, con una gran cantidad de maraña de pelo blanco en su pecho, los cabellos de la cara eran alborotados y los ojos rojos. Le recordaba a Gaeity por tener, también, los cabellos de la cara desmechados, aunque el zorro los tenía más prolijos. Este lobo tenía todos los pelos desaliñados, como si hubiera pasado en medio de una ventisca. Y, en la nuca, su cabello le llegaba hasta por el cuello.

— ¿Tienes la ocurrencia de practicar por noches oscuras? —qué carácter tan expresivo que tenía, pensó ella.

—No del todo —logró contestar mientras caminaban—. Últimamente estoy entrenando por las noches.

—Pues deberías estar más atenta—la zorra asintió y llegaron a la casa—. Estaré dando vueltas por éste lugar, así que creo que te veré seguido. ¡Ten más cuidado la próxima vez! —y lo vio alejarse.

No fue la última vez que lo vio, como le había dicho. Se lo encontró varias veces más por la isla, ayudando a varias personas y siendo de gran utilidad entre los médicos del pueblo. Stefi solía charlar con él a menudo. Le empezaba a agradar…

Pasaron algunos meses. Pride tenía que volver a Station Square, a retomar sus estudios. Prometieron mantenerse en contacto. Su relación estaba casi rozando en algo más profundo, pero se mantuvieron en simples amigos.

Días después de la partida del lobo, una expedición se llevaría a cabo para recoger víveres importantes para isla, pero esa partida sería en algunas semanas. Semanas en que las que los sueños de Stefi se tornaban más turbulentos que en otras ocasiones…

Poco después de recoger la esmeralda, hacía dos años, cada tanto soñaba con la silueta alguien, tal vez un hombre,  que le decía exactamente lo mismo que ella había pronunciado en la cueva de Mistyc Ruins “los servidores son los siete Chaos… Chaos es poder… Poder enriquecido por el corazón”, pero con un agregado más “Portadora…”, algo que siempre la inquietaba. Según lo que ella sabía, eran siete las esmeraldas conocidas. Pero hacía un tiempo que una voz de hombre, una voz suave le repetía “Portadora, búscalos, ellos necesitan de ti”, y se esfumaba. A juzgar por la silueta, parecía un erizo, aunque era sólo una suposición.

Buscar… Necesitar… ¿Quiénes? Y cuanto más pensaba en ello, más brillaba la esmeralda. ¿Estaba relacionado, acaso? Pensaba esto en la punta de un barranco, mientras el viento soplaba lentamente por su rostro y Ready, su chao, revoloteaba alrededor de ella.

— ¿Qué será, Ready? —Le preguntaba a la pequeña—. ¿Sabes? Siento que tengo que ir a Station Square… —y se quedó pensativa…

Station Square llegó más pronto de lo que ella esperaba, por la expedición en búsqueda de víveres. En aquélla oportunidad, Gaeity emprendió el viaje con ella, algo que era particular porque, normalmente, no salía ir en aquéllas expediciones.

Cuando terminaron sus deberes, Stefi invitó a su amigo a ir a un lugar especial, a Mistyc Ruins, en donde le comentó lo que, realmente, había pasado con la esmeralda.

Le estaba mostrando el lugar cuando oyeron un ruido sordo delante de ellos, provenía de la cueva que estaba junto al lago: ambos fueron corriendo.
En la oscuridad, se toparon con alguien a quien no reconocieron.

— ¡Me tropecé! —exclamaba una voz de muchacho. Gaeity y Stefi, a tientas, lo ayudaron a ponerse de pie y, entre los dos, salieron de allí: a la luz, resultó ser un erizo de color celeste y azul, con algunas púas extendidas hacia arriba e intensos ojos brillantes, también celestes. Ambos zorros depositaron al muchacho en el suelo—. Pisé una roca y caí mal…

—Te habrás torcido el tobillo —sugirió Gaiety—. Lo mejor será llevarlo a un hospital, al menos, para que te saquen una placa —el erizo asintió y aceptó de buena manera la ayuda de los muchachos.

Llegaron al hospital en menos de media hora y, para sorpresa de Stefi, se topó con Pride quien estaba, en ése momento, de guardia y en seguida ella le expuso la situación al lobo.

Luego de unas horas, el erizo agradeció infinitamente la ayuda de ambos. Se presentó con como Blue the hedgehog y se despidió de ellos, no sin antes ayudarlo a subir a su barco.

— ¡Espero volverlos a ver! ¡Y gracias!

Y ambos regresaron a su pequeña embarcación.

— ¿De dónde lo conoces a ése enfermero?

Stefi se puso algo nerviosa y fingió mirar el paisaje.

—Vino a Fox Island hace un tiempo. Estaba de prácticas —explicó secamente—. Me… me había golpeado el brazo y me atendió —mintió ella. Gaeity no quedó del todo convencido, pero bueno, no sonaba tan extraño. Pero tenía ciertas sospechas de que no le estaba siendo del todo sincera. Se calló la boca.

— ¿Qué es eso? —dijo uno de la embarcación, de pronto: todos se atiborraron a las ventanas y notaron varias filas de humo negruzco que se llegaba hasta el cielo.

Los corazones de toda la tripulación dieron un vuelco gigante y la desesperación empezó a apoderárseles: aumentaron la velocidad y fueron derecho hasta su isla. Al desembarcar, sus ojos se pusieron de color blanco: fuego… ¡Fuego a raudales por todo lo que veían! ¡Casas, negocios, hasta el hospital! Todos se dividieron y empezaron a ayudar de inmediato: Stefi corrió hacia su hogar y Gaiety hacia el suyo.

Durante la travesía, la esmeralda no dejó de brillar.

 “¡Debes protegerlos! ¡De ellos! ¡Vienen por ti!”

¿Qué diablos?, se dijo ella, deteniéndose de golpe: viró hacia un costado su cabeza y distinguió una silueta, tal y como en sus sueños.

— ¡La encontré! —vociferó una voz gruesa y prepotente: Stefi quedó paralizada, con los ojos como platos. 

Se giró lentamente hacia dónde provenía la voz: se encontró cara a cara con un rudo erizo verde, de gafas oscuras, chaqueta negra y semblante aterrador. Stefi tragó grueso e, inconscientemente, se llevó una mano en el bolsillo, donde estaba la esmeralda.

Grave error: éste brilló y la delató como lo que ése tipo estaba buscando.

Stefi, asustada, pero sin perder la calma, giró para pedir ayuda a aquél ser que le había hablado con anterioridad: éste se había convertido en una bola de energía oscura y desapareció delante de sus ojos. 

Requiriendo de todo su autoctrontol, volvió a ver la cara de ése erizo, quien, con brusquedad la tomó por el brazo. El tipo verde empezó a reír y ella gruñó, intentando zafarse de su agarre.

—Primor, eso no te servirá —Stefi empezó a enojarse: no sólo por la situación, sino porque detestaba que la halagaran.

Con el resto del cuerpo libre, le dio una patada en el mentó, logrando salirse de su agarre. Eso no causó mucha gracia a aquél erizo.

—Conque ruda, ¿eh? No pareces con ese semblante tan dulce —comentó sin más—. Si vas a pelear, que sea en serio, y no como tu pueblo que está lleno de debiluchos —se burló: la ira se incrementaba, pero no podía dejar que fluyera como una cascada, pues eso la haría actuar sin consciencia, lo cual sería un error garrafal.

Se puso en guardia.

—Si has hecho todo éste escándalo por mí, puedo asegurarte que no saldrás de aquí, no entero —amenazó.

—Y si lo hice, ¿qué? No querían decirme dónde estabas, así que busqué por mi cuenta —eso le valió otra patada, pero que detuvo a tiempo.

Fue una pelea intensa que sólo duró unos diez minutos, pero que se hicieron eternos. Ella estaba en clara desventaja: se notaba que el erizo era un diestro en peleas, pues esquivaba y atacaba con facilidad. El agua que corría, producto de su poder, fluyó y empezó a atacar al erizo con chorros de líquido.

—Definitivamente eres la portadora que busco —le dijo.

— ¡No soy ninguna portadora! —gritó ella—. ¡Lárgate de mi pueblo! ¡No tienes derecho a hacer lo que hiciste! —una risa jocosa la desconcentró.

Lo único que hacía Scrouge, pues así se llamaba el erizo, era provocarla para luego rematarla, pero no 
contó con un ataque directo con la fuerza de una cascada que lo golpeó fuertemente: casi se ahoga.

Enfadado, se puso serio. Stefi, por otro lado, parecía poseía, pues no paraba de atacar a diestra y siniestra con ataques acuáticos, sin dejar de gritar “¡Vete de mi hogar! ¡Deja de hacer daño!”

Scrouge terminó yéndose, hastiado.

Y, Stefi, tumbada en el suelo, yacía inconsciente, mientras varias voces gritaban a su alrededor…

OoOoOoO


................
......................
..............................

Y eso es todo!
Por ahora...
El segundo capitulo sera los otros integrantes que lo escribirán.
Así que debería llegar pronto.
Pero después deberán esperar, tal vez por un largo periodo.

Cuídense, coman todas sus verduras y respondan a la encuesta, por favor.

Sin mas que decir, buen día y no dejen que los Emos les amarguen la jornada!

~ Cyan S. ~ 

miércoles, 23 de octubre de 2013

domingo, 20 de octubre de 2013

Especial de Imágenes 1 ~

Hola gente!!
Les traigo aqui unos dibujos de los cuales no se van a resistir y van a descargar, porque son demasiado lindos como para ser ignorados. Varios artistas hicieron estas obras maestras asi que primero empezare con uno, y luego hare otra entrada con otro artista o3o

Amy Rose Fangirl → Agente Little Rose

















domingo, 15 de septiembre de 2013

Prologo: Cyan Emerald


Todo por una esmeralda.

La ciudad de Mobius es muy activa e interesante, todos los comercios  están concentrados en esta gran e importante ciudad. Pero Mobius tiene un bosque, dividido en varias partes con una variedad increíble de vegetación. Interesémonos a una parte de este, ya que la historia de nuestra eriza es la importante por el momento.
En medio de tanto árbol había un lugar en  donde no crecía ninguno ya que se había construido una acogedora casa. Con los primeros rayos del sol, la única habitante corporal de la casa se despertó. La eriza de ojos bicolor se sentó en su cama estirándose y bostezando al mismo tiempo, no tenía ni ganas ni energía de levantarse pero sabía que su hermano mayor vendría y haría lo imposible para que volviera a sus estudios y entrenamientos.
En 20 minutos ya estaba lista y su habitación estaba ordenada… en fin “ordenada”. Bajo a la cocina donde su desayuno estaba listo y caliente, sonrió y se sentó a comer.
-Es un milagro que te hayas despertado tan temprano- dijo una voz.
-Buenos días a ti también Henry, ¿dormiste bien? Estas un poco pálido, pareces un espíritu. ¡Deberías dormir!.-respondió en defensa la eriza azul.
-Ha, ha, ha…. Muy graciosa hermanita. Apúrate antes de que el Emo venga y te haga el discurso de siempre.
-“Deberías tomártelo más enserio piensa n lo que te ayudara para el futuro y ñañañaña….” –imito la chica con una voz seria- tienes razón, mejor apurarse. Gracias por el desayuno, te quedo delicioso- agrego dirigiéndose a su “hermano” celeste de ojos negro de la misma especie que ella pero con un cuerpo incorpóreo.
Se dirigió a la biblioteca, no tan grande como la de la realeza pero con suficientes libros como para ocupar la habitación de dos pisos. En el escritorio había dos pilas de libros, Harriet suspiró: el día se veía largo…
 -No te quejes y empieza- dijo otro “fantasma de erizo” negro y de ojos violetas- termina con la primera pila y después podrás entrenarte.-agrego desde una esquina oscura de la biblioteca. La eriza asintió en silencio y tomo asiento para poder concentrarse y empezar con su tarea.

Ya había pasado un año después que los hermanos Moonlight destruyeron ese cristal, pero lo pagaron caro: perdieron sus cuerpos. Sin embargo se quedaron con Harriet, su hermana, no la iban a abandonar, no ahora, no mañana, no a sus  18, nunca. La joven Hedgehog se acostumbró a que aparecieran  y desaparecieran, a que a veces se encontrara sola en casa, a hacer comida para uno, a limpiar la casa sola, a que la miraran raro porque nadie más los veía, se acostumbró a muchas cosas menos al hecho a que las dos personas que más quería ya nunca más podría abrazar. Eso fue y es lo que más le duele, le dolía mucho el hecho de perder el cariño que por fin había logrado encontrar; no tuvo cariño paternal, ni maternal. Desde que fue adoptada por los dos erizos los consideró sus hermanos, como su verdadera familia. Y ahora no los podía tocar, no estaba sola pero de vez en cuando le hacía falta un abrazo o contacto…
Llevaba 5 horas en el mismo capítulo del mismo libro, estaba otra vez distraída, miraba por la ventana constantemente, algo le decía que tenía que ir a ese lugar…
El espíritu de erizo se dio cuenta a penas la eriza entro la habitación, pero tuvo la esperanza de que igual se podría concentrarse. Suspiro, hace un mes que su hermana estaba así… y tenía un presentimiento del porqué.
-Harriet, concéntrate. Sé que te resulta agotador y aburrido leer todos estos libros, pero necesitas saber lo básico para controlar mis poderes. Controlas a la perfección los de Henry, controlar la oscuridad es más difícil que controlar en aire.
No obtuvo respuesta alguna, la eriza seguía mirando por la ventana. Conocía los discursos de Yoel de memoria, siempre lo mismo…
-Tómate un descanso, no, tómate todo el día pero quiero que mañana termines todos los libros de la sección- y sin más, el ojipúrpura desapareció.
Harriet se dirigió a un claro del bosque que ya se conocía de memoria, se sentó a las orillas del río a pensar, a recordar. Su madres, el día que escapo, cuando conoció a sus hermanos y cuando creyó perderles.
Sacudió la cabeza, decidió despejarse la mente: se puso de pie y empezó a jugar con el agua del río, la moldeaba dándole diferentes formas. Dragones, peces, cisnes, mariposas, aves, todo lo que se le pasaba por la mente.
Y la vio, de repente, una luz azul claro que provenía del fondo del río. Con un movimiento de mano, un chorro de agua trajo a la superficie el culpable de aquel brillo: una joya. Le recordaba una esmeralda. Pero… ¿no se suponía que las esmeraldas eran verdes? ¿Y por qué esta produce luz? Ese brillo cyan era reconfortante, Harriet se acercó, con cuidado, y se dio cuenta que el brillo aumentaba con cada paso que daba hacia la joya. Cuando la agarró sintió paz, calor, seguridad, era una sensación agradable, algo que no sentía hace tiempo.
Sintió una mano en su hombro, se dio la vuelta para ver quién era y sus ojos se agrandaron de la sorpresa. Era Henry que la tocaba, ¡la estaba tocando! El erizo sonrió y espontáneamente la abrazo a no poder, la pobre no entendía: su hermano-gemelo seguía siendo incorpóreo, pero  ¡qué más da! Correspondió el abrazo con la esmeralda aun en sus manos, cuanto había extrañado el cariño, el amor fraternal, el sentimiento de consuelo.
Sintió otro par de brazos más, uniéndose al gesto, sin abrir los ojos, Harriet sabía que se trataba de Yoel, y no pudiendo más lloró, lloró de felicidad riendo y sonriendo.
-Creo que te debemos una explicación- dijo el erizo negro rompiendo el abrazo. Ella se limitó a mirarlos con una gran expresión de duda y curiosidad- Lo que tienes en las manos es una esmeralda Chaos. Y el brillo que desprende solo se produce cuando es el o la portador/a que la sostiene. – Harriet abrió la boca para preguntar pero su hermano la conocía demasiado bien- Una portadora, en este caso tú, es una persona que tiene una conexión especial con una esmeralda, tiene que cuidar que no caiga en malas manos y que se use para el bien. Si quieren destruir la esmeralda para siempre se destruye al portador o vice-versa.
-Los portadores son muy poderosos una vez que saben controlar a la perfección su esmeralda, sus poderes aumentan. Sin embargo es muy difícil llegar a entender una esmeralda Chaos, incluso para el portador.-continuo el otro Moonlight- Una vez que el portador ha tocado su esmeralda, el poder de esta aumenta a una gran escala. Es por eso que ahora hay que tener mucho cuidado, si cae en malas manos estamos fritos, el mundo se puede acabar y no podrás molestar a nadie más en toda tu vida.
-Pero…. ¿Esta no es una de las esmeraldas que Sonic&Cia usan para vencer a ese huevo con piernas y brazos?
-Si- le respondió Henry con una sonrisa- tu deber en tanto que portadora es hacer que llegue a buenos manos y, en caso contrario, recuperarla. Pero no todos saben que existen los portadores y es mejor así.
-Tienes que mantener esta ignorancia, será más fácil para ti- le recomendó Yoel
-Entiendo…- seguía teniendo la esmeralda cyan entre sus manos, la reconfortaba ese poder, esa sensación tan reconfortante- ¡Ah! ¿Porque  ahora los puedo tocar?
-Porque, ahora corre dentro de ti el poder Chaos, es un poder sumamente poderoso e importante, pero solo a veces podrás tocarnos- respondió el serio- el lado bueno es que, como estamos unidos a ti, el poder de la esmeralda nos refuerza también.
Y acto seguido, unas cadenas negras salieron del suelo para desaparecer unos segundos después.
-Con el tiempo seremos más fuertes y te ayudaremos con tu misión: encontrar a los demás portadores –le prometió su falso gemelo.
-¿Cuántas esmeraldas hay?
-Son 7…generalmente. Pero a veces cuando personas especiales nacen al mismo tiempo o después una esmeralda es creada, obligando a estas personas a ser portadoras.-contesto Yoel
-¿Y cómo es que saben tanto sobre el tema?        
-Hicimos parte del escuadrón de protección- esta vez fue Henry el que respondió- es un grupo secreto encargado de la seguridad de los portadores y de las esmeraldas. Ayudan en todo lo posible: armas, escuadrones, ropa, comida, ayuda psicológica, etc… GUN también ayuda a este grupo, en general con armamento.
-Lo más importante, por el momento, es encontrar a los otros portadores. Creo que hay un detector de esmeraldas en el sótano. –dijo el erizo negro
-En ese caso, vuelvo a casa-dijo la única chica, dirigiéndose a su hogar.
-No te preocupes, nosotros lo buscaremos- se propuso el celeste.
-Aun así, tengo que aprender a controlar la oscuridad como lo hago con el agua
Los hermanos de sangre sonrieron y dijeron al unísono con cierto cariño: -Esa es nuestra Pequeña Luz de Luna.
Lo que provoco que la nombrada parara y se diera la vuelta
-¡No me llaméis así!-exclamo con las mejillas rojas e infladas. Y rieron, juntos y felices, como hace tiempo que no lo hacían.
No sabían lo que les esperaba, pero lo harían juntos.
Con amigos y enemigos, con amistades y rivalidades, con soluciones y problemas.
Pero juntos, como un Team… que se agrandaría con el tiempo.
3 meses después…
Nuestra eriza estaba escondida en las ramas de un árbol observando la pelea que se está llevando a cabo unos metros más abajo. Tres erizos, uno azul, otro negro con rojo y uno plateado, se enfrentaban a un hombre-huevo-bigotudo el cual daba órdenes a un gigante y potente robot. Los erizos estaban ganando, dos de ellos tenían una esmeralda, la azul y la roja. El erizo de ojos dorados fue enviado contra un árbol por el potente robot y cayó en unos arbustos. Harriet sonrió, en esos arbustos había dejado su esmeralda y pronto la encontraría.
Y así fue, con tres esmeraldas en sus poder pudieron vencer al robot, el Egghead se retiró, por no decir huyo, lo más rápido no sin antes llevarse la esmeralda cyan…
La eriza espero a que los héroes se perdieran de su vista para bajar del árbol, extendió su mano y cerró los ojos para concentrarse. Una luz  se empezó a aparecer en su mano para dejar paso a la esmeralda cyan.
-Veo que ya sabes controlar la invocación de tu esmeralda.
-Así es, Henry, todo gracias a tus clases de 20 horas por día- se dio la vuelta para quedar frente a su hermano- ¿Tus visitas al pueblo en “modo invisible” dieron resultados?
-Si, se dice que hay una chica que vive en el bosque del norte, el viento me dijo que se llama Mochi: es una lince, las plantas rumorean que tiene un poder especial además es una de las pocas que puede comunicarse con ellas. También las aves cantan que hay un brillo gris en el bosque del sur hace ya un tiempo.
-Segur averiguando, si tenemos más informaciones iré a buscar a la lince- hablo y cayo un momento para luego soltar un suspiro- Todavía tenemos que encontrar a 11 portadores más. ¡Ojala el detector de esmeraldas se equivoque!
-Sigue soñando, hermanita- dijo con tono burlón.
10 meses después
Estaba en su escritorio… o mejor dicho, el de Yoel. Escribiendo en un cuaderno los descubrimientos y deducciones que tenía hasta ahora:
  Azul → Blue The Hedgehog
  Rosa → Claudia Rose The Hedgehog
  Roja → Noah The Hedgehog
Verde → Mochi The Lynx 
  Amarilla →…
  Naranja → ...
  Blanca →…
  Gris → Chess The Hedgehog? 
  Negra →…
  Violeta →…
  Violeta Oscuro →…
  Cyan → Yo

Demon Star → Melody The Hedgehog


-¿Qué escribes? –pregunto un curioso espíritu de erizo celeste poniéndose detrás de la portadora.
-Los portadores, mañana iré a ver a Mochi-se decidió la eriza- después me encargare de Chess.
-¿Le avisaste a Blue que no estarás?
-Le envié un mensaje a su comunicador, le tendrá al tanto si encuentra otro portador.
-Te acompañaremos- se apresuró a decir su hermano
-En ese caso iré a preparar mis cosas, avisa a Yoel y dile que prepare mi Extreme Gear. Sera un viaje de una semana.
-Yo preparare las provisiones- le dijo con una sonrisa- ¡Espera!- exclamo al ver que iba a cerrar el cuaderno- falta algo.-Agarro una pluma y escribió algo en la parte superior de la página.- ¡Listo! La búsqueda empieza ahora- dijo dirigiéndose a la salida. En el marco de la puerta se dio la vuelta- como se lo dijiste a Claudia- y siguió su camino.
Harriet bajo la mirada y vio lo que había sido escrito recientemente, no pudo evitar sonreír y gritar: -¡Henry!, ¡Escribes como una chica!
-¡Yoel me enseño! ¡Es su culpa de ser tan afeminado!- la respuesta llego desde la cocina
-¡LOS ESTOY ESCUCHANDO!- grito un Yoel enojado desde el sótano donde estaba el pequeño taller.
-Entonces escucha esto: ¡EMO AFEMINADO ANTISOCIAL! –fue la respuesta del hermano celeste
Harriet soltó una leve risa y volvió a mirar su cuaderno, con una letra regular y perfecta, el nombre del Team:
The Seven Chaos

2 semanas después
-Ya casi llegamos. Veras que serán como una familia, Nerea-tranquilizó un erizo celeste de vetas azules a una eriza violeta con sus puntas de cabello negras.
-¿Cuantos son?- preguntó tímidamente la eriza
-Mmm...Déjame pensar- respondió otra eriza, mayor y de color rosa con puntas violetas. Cargaba en su espalda otra eriza de ojos azules, del mismo pelaje que ella.- Esta Mochi, Chess, eXe y Harriet. Tú serás la quinta en vivir en la casa-cuartel.
-¿Están seguros de que soy una portadora? Digo, tal vez se equivocaron…
-¡Nerea! Una esmeralda solo brilla con esa intensidad cuando es su portador quien la tiene en manos, ye te lo he dicho.- dijo con voz de reproche la menor de todos.
-Claudia tiene razón, estamos seguros que eres la portadora de la esmeralda violeta.- respondió el erizo de ojos turquesas.
-Mira, ya llegamos.- dijo Noah, apuntando una casa en medio de una gran cantidad de árboles al tiempo que dejaba en el suelo a la eriza de 12 años. Esta, al pisar el piso, fue corriendo a donde estaba una lince amarilla que al parecer hablaba con las plantas de un macetero.
-¡Mochiiiiii!-gritaba al mismo tiempo que corría con los brazos abiertos.
-Uh?-la nombrada giro la cabeza y recibió a la pequeña entre sus brazos- ¡Claudia! ¡Te extrañe! ¿Cómo has estado?
-¡¿QUE PASA?! ¡¿SE QUEMA LA CASA?!- grito una eriza de ojos color miel que al parecer estaba durmiendo apoyada en un árbol cercano. Pero se alegró al ver a la portadora rosa. – ¡Clau!
-Mejor entremos nosotros 3- adentro deben de estar Harriet y eXe- dijo Noah al ver la escena: Chess se había unido al abrazo. Entraron a la casa, pasaron al comedor que estaba unido a la cocina.
-¿Donde esta esa eriza?- pregunto a nadie en especial Blue- ¡Harriet!
-¡En la sala de computadoras!-se escuchó una voz la cual siguieron hasta una habitación que estaba llena de máquinas y computadoras en las cuales estaba trabajando un erizo idéntico a Sonic solo que con una cinturón y unas zapatillas grises, detrás de este había una eriza de pie que se dio la vuelta al sentirlos entrar-Hola Blue, hola Red. ¿Qué tal les va?- saludo la eriza de ojos bicolor.
-GUN me tiene trabajando pero me hice un espacio para venir.
-Te trajimos una nueva integrante para el Team y para la familia.
Harriet se acercó a la eriza violeta y le extendió la mano- Hola, soy Harriet, la portadora de la esmeralda Cyan. ¿Cómo te llamas?
-Ne-Nerea,-tartamudeo la ojiroja-me llamo Nerea.
-Un gusto Nerea, ¿tienes algún poder?
-Sí, pero no se controlarlo…
-No te preocupes, aquí te enseñaremos.-respondió con una sonrisa la eriza cyan.- Ven, te presento a Sonic X, nuestro técnico e informático.
-Encantado, me puedes llamar eXe, es más corto- dijo el clon mientras le daba la mano y hacia un guiño con el  ojo.
Nerea tuvo que aceptarlo, rápidamente se sintió en confianza con esas personas. Conoció a Blue una vez que la salvó, a Noah quién la curó y a Claudia quien le hizo de compañía. Y esos dos erizos, se veían simpáticos, tal vez si serian una nueva familia…
-Noah, sé que estas ajetreada pero te tengo una misión.-dijo con tono serio la eriza cyan.
-Dime. Haré todo lo posible para realizarla en el menor tiempo posible
-Bien, mira la pantalla- dijo la oji-bicolor mientras tecleaba algo- hay una chica en el GUN que se llama Katy, al parecer se fue en una misión con Rouge y Shadow en la cual descubrió una “conexión especial” con la esmeralda amarilla que ahora está en su posesión – decía al tiempo que la imagen de una eriza negra de ojos cafés aparecía- Necesito que averigües mas sobre ella, tengo la impresión que es una portadora. ¿Crees que podrás hacerlo, con discreción?
-Por supuesto- respondió con una sonrisa de lado- cuenta conmigo
-Harriet, le esmeralda Naranja ha sido localizada- informó eXe- el poder que desprende va aumentando de a poco. En unos días dará con su portador. ¿La vigilo?
-Sí, debemos estar atentos.- respondió Harriet-Exe, ¿podrías llevar a Nerea afuera?, para que conozca a las demás.-pidió después de un incómodo silencio.
-Por supuesto, ven Nerea te presentare a  Chess y a Mochi.
Una vez de que salieron y se escuchó el ruido de la puerta cerrarse, Harriet buscó en la memoria del computador lo que tanto necesitaba mostrarles a sus “agentes infiltrados”: un mapa con un punto celeste y uno morado que estaba junto a una espiral de tonos azules. Luego de tres segundos los puntos desaparecieron y la espiral disminuyó su tamaño hasta desaparecer.
-¿Que fue eso? –pregunto con asombro Blue que miro todo detalladamente.
-Eso, mi querido Blue, fue lo último que sabemos sobre la localización de Nazo… y de Mephiles.
-¡¿Mephiles?!- Exclamó Noah- No…déjame adivinar, Nazo está buscando secuaces, ¿no?- La eriza cuestionada solo afirmo con su cabeza.
-Pero, ¿que estaban haciendo al lado de un portal?- pregunto el único hombre presente
-Tengo mis sospechas, creo que fueron a buscar a Scourge, el “Anti-Sonic”- dijo preocupada Harriet- Tengo miedo de que… de que vayan a buscar a Metal Sonic.
-¡¿Qué?!-  gritó Blue
-No me digas que…que… ¿descubrieron lo de los portadores?- pregunto muy preocupada Noah
-Creo que sí, Red…. Y creo que la existencia del Seven Chaos saldrá a la luz más pronto de lo que creíamos.

Escrito por S.S.S.Hedgehogs